Bárbaros a las puertas
Las cosas se agravan hoy, sin embargo, porque la amenaza nacionalpopulista es alimentada por unos discursos hiperbólicos que contaminan redes sociales que, aunque pueden impulsar primaveras democráticas, son capaces también de fomentar la inestabilidad del status quo democrático. Ya hemos visto como en la más vieja e institucionalizada democracia, la polarización política, azuzada en las redes por el presidente Trump y otros líderes “republicanos”, esgrimiendo la falsedad del “fraude electoral”, llevó al asalto al Capitolio con la finalidad de evitar un traspaso de mando a la oposición