Target y Walmart ofrecen pagar los estudios de sus empleados

En los últimos años, otras empresas estadounidenses, han apostado por colaborar con instituciones educativas para cubrir los fuertes gastos de matrícula de sus empleados que quieren cursar estudios.

NUEVA YORK.- La cadena de grandes almacenes estadounidense Target anunció este miércoles que a partir de septiembre ofrecerá cubrir el coste de los estudios de sus empleados, sumándose a otra gran corporación del país, Walmart, en la mejora del acceso a la educación de su plantilla para impulsar las contrataciones.

Target destinará 200 millones de dólares a un programa de cuatro años de duración para que sus empleados a tiempo completo o parcial puedan estudiar títulos universitarios en una serie de instituciones sin tener que ocuparse de la deuda de la matrícula, los libros de texto y otros pagos, según explicó en un comunicado.

Los 340.000 trabajadores de tiendas, centros de distribución y sedes de Target en EE.UU. podrán acceder desde «el primer día de trabajo» a unos 250 planes de estudio relacionados con su negocio, en ramas como administración de empresas, tecnologías de la información o diseño.

Entre las 40 instituciones que cita la empresa están universidades como la de Arizona, la del estado de Oregón, Denver, Cornell y otras universidades y escuelas de educación superior históricamente afroamericanas (HBCU) como Morehouse College y Paul Quinn College.

Si los empleados quieren cursar estudios fuera del plan y la red ofrecidos por Target, aún así la compañía se compromete a pagar anualmente más de 5.000 dólares, y hasta 10.000 en el caso de ser títulos de máster.

La iniciativa es similar a la anunciada recientemente por la cadena minorista Walmart, la empresa más grande del país por número de empleados, que ofrecía desde hace tres años un programa de asistencia educativa por 1 dólar diario y ha decidido eliminar esa barrera para sus 1,5 millones de trabajadores a tiempo completo y parcial a partir de este mes.

Walmart dijo en un comunicado que destinará casi 1.000 millones de dólares en los próximos cinco años a la formación y el desarrollo de carreras de su cuantiosa plantilla, de manera que puedan «lograr títulos universitarios o aprender profesiones sin la carga de la deuda educativa».

Ambas compañías contrataron a miles de trabajadores de primera línea durante la pandemia y ahora se enfrentan al reto de retenerlos y ajustarse a un mayor consumo de bienes mientras la economía de EE.UU. se recupera, con el problema de un mercado laboral que sigue lastrado.

En los últimos años, otras empresas estadounidenses, desde Starbucks y Chipotle, del sector de la restauración, hasta ha operadora de telecomunicaciones T-Mobile, han apostado por colaborar con instituciones educativas para cubrir los fuertes gastos de matrícula de sus empleados que quieren cursar estudios.