¿Te arden los ojos? El polvo del Sahara y el calor podrían ser los culpables

Especialista alerta sobre el aumento de casos de ojo seco e infecciones oculares.

Santo Domingo. – Las altas temperaturas que azotan actualmente a la República Dominicana, junto con la presencia del polvo del Sahara, están teniendo un impacto directo en la salud ocular de la población. La doctora Judith Portorreal, oftalmóloga especialista en ojo seco, advierte que estas condiciones aumentan significativamente el riesgo de molestias y enfermedades en los ojos.

El calor favorece la evaporación de las lágrimas

La doctora Portorreal explica que el calor extremo provoca una evaporación acelerada de las lágrimas, lo que contribuye a la aparición de ojo seco evaporativo.
Cuando las lágrimas se evaporan más rápido de lo normal, los ojos quedan resecos, expuestos e inflamados. Esto genera síntomas como ardor, picazón, enrojecimiento, lagrimeo excesivo, ganas de frotarse los ojos y, en algunos casos, visión borrosa”, indicó la especialista.

Polvo del Sahara: un irritante invisible

A las altas temperaturas se suma la llegada anual del polvo del Sahara, cuyas partículas viajan miles de kilómetros hasta el Caribe. Este fenómeno no solo afecta la calidad del aire, sino que porta virus, bacterias y hongos capaces de irritar la superficie ocular.

Durante estos episodios se incrementan las infecciones oculares, como la conjuntivitis, además de alergias y síntomas de ojo seco”, señala Portorreal.

Recomendaciones para proteger los ojos

Ante este escenario, la oftalmóloga sugiere tomar medidas preventivas para cuidar la salud visual:

Luz pulsada intensa, una nueva opción de tratamiento

Portorreal también destaca una alternativa terapéutica reciente: la terapia con luz pulsada intensa (IPL).
Este tratamiento puede aplicarse de manera preventiva para reducir los efectos del polvo del Sahara. Mediante la luz pulsada se disminuye la inflamación, se mejora la calidad de la lágrima y se alivian los síntomas de alergias y resequedad”, explicó. El protocolo incluye una sesión mensual durante tres meses.

Finalmente, la doctora enfatiza que la prevención es clave: “Estas medidas simples pueden marcar una gran diferencia y evitar complicaciones mayores durante esta temporada”.