Técnicos medioambientales denuncian depredación en bosques Cordillera Central

Dentro de los delitos señalados por el equipo de técnicos destacan el corte no regulado de pino y otras especies, así como también la no reposición y plantación de otros árboles, que mitiguen el impacto negativo de esas acciones.

Elías Piña.-  Durante un recorrido de seguimiento y supervisión a los trabajos de cuidados medioambientales en la Cordillera Central, un equipo de técnicos fue testigo de acciones depredadoras de recursos naturales y la inacción de las autoridades.

La denuncia realizada por una comisión de técnicos del Instituto Dominicano de Desarrollo Integral (IDDI), establece que el grupo presenció estas acciones de depredación y de tala indiscriminada de algunos bosques en la Cordillera Central, a la vista de todos, además del mal estado de la vía de comunicación entre las comunidades de Restauración y Pedro Santana, de norte a sur.

La institución que gestiona el Fondo de Adaptación en el país, condenó la inacción de las autoridades locales ante estos ilícitos que pudieran ser evitados de manera oportuna, y llamó a las organizaciones comunitarias de las provincias de Elías Piña y Dajabón a constituirse en vigilantes de ese patrimonio ecológico.

Dentro de los delitos señalados por el equipo de técnicos destacan el corte no regulado de pino y otras especies, así como también la no reposición y plantación de otros árboles, que mitiguen el impacto negativo de esas acciones.

El IDDI realizó un llamado al Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, al Consejo del Cambio Climático y al Presidente de la República, Luis Abinader; para que realicen una intervención oportuna que sancione estos crímenes ambientales y que puedan desarrollar un plan que ayude en el restablecimiento de los árboles talados para proteger dichos bosques.

La organización no gubernamental que tiene dentro de sus ejes un capitulo dedicado a la acción y protección medioambiental, recordó a la ciudadanía que sin bosques no hay agua y sin agua no hay vida, por lo que invita a que las comunidades asuman el rol de veedores y guardianes de estos recursos naturales.