x
Batalla Electoral 2024

“Tu puedes Elegir”

Un cordial saludo a todos mis queridos lectores.

Dios creó al hombre a su imagen y semejanza, le dio lo más grande que puede tener un ser humano y es la libertad. Nosotros somos libres, podemos elegir entre ser buenos o malos, entre ser fieles o infieles, puedo elegir la carrera que quiero estudiar, en que universidad quiero estudiar, puedo elegir hasta entre ser pobre, bien pobre, como comúnmente se dice pobre de solemnidad o tener más o menos una situación económica regular.

Ahora bien, eso cuesta, y no solamente el costo es material o monetario, sino un costo de sacrificio, de honestidad, de superación, muchas veces hasta de negación a nosotros mismos, y claro eso no es fácil, hay que dejar muchas cosas y así aprenderemos el valor de lo que sucede en nuestra vida. Porque lo que nada nos cuesta, hagámoslo fiesta, dice el refrán.

Les quiero contar la historia de un señor llamado Pepe, y dice así: “Pepe es una persona que te encantaría ser. Siempre estaba de buen humor y siempre tenía algo positivo que decir. Cuando alguien le preguntaba cómo le iba, el respondía: Mejor, imposible. Había cambiado de trabajo y varios de sus colaboradores le habían seguido en todos sus cambios. La razón de que le siguieran era su actitud; era un motivador natural. Si un empleado tenía un mal día, Pepe estaba ahí para decirle al empleado cómo ver el lado positivo de la situación. Un día fui a buscar a Pepe y le pregunté: No lo entiendo, no es posible ser una persona positiva todo el tiempo. ¿Cómo lo haces? Pepe respondió: Cada mañana me despierto y me digo a mí mismo: Pepe, tienes dos opciones hoy: puedes escoger estar de buen o mal humor. Escojo estar de buen humor. Cada vez que sucede algo malo, puedo escoger entre ser una víctima o aprender de ella. Escojo aprender de ello. Cada vez que alguien viene a mí para quejarse, puedo aceptar su queja o puedo señalarle el lado positivo de la vida. Escojo señalarle el lado positivo de la vida. Sí, claro, pero no es tan fácil, protesté, Si lo es, dijo Pepe. Todo en la vida es acerca de elecciones. Cuando quitas todo lo demás, cada situación es una elección. Tú eliges cómo reaccionas ante cada situación, tú eliges cómo la gente afectará tu estado de ánimo, tú eliges estar de buen o de mal humor. En resumen: tú eliges como vivir la vida.

Varios años más tarde, me enteré que Pepe hizo algo que nunca debe hacerse en un negocio, dejó la puerta de atrás abierta y una mañana fue asaltado por tres ladrones armados. Trataba de abrir la caja fuerte, su mano, temblando por el nerviosismo, resbaló de la combinación. Los asaltantes sintieron pánico y le dispararon.

Pepe fue encontrado relativamente pronto y llevado de emergencia a una clínica. Después de ocho horas de cirugía y semanas de terapia intensiva. Pepe fue dado de alta, aún con fragmentos de bala en su cuerpo. Me encontré con Pepe seis meses después del accidente y cuando le pregunte cómo estaba, me respondió: Mejor, imposible. Le pregunte ¿qué pasó por su mente en el momento del asalto? Contestó: Cuando estaba tirado en el piso recordé que tenía dos opciones: podía elegir vivir o podía elegir morir. Elegí vivir.

¿No sentiste miedo, Le pregunté? Pepe continuó: Los médicos fueron geniales, No dejaban de decirme que iba a estar bien. Pero cuando me llevaron al quirófano y vi las expresiones en las caras de los médicos y enfermeras, realmente me asusté. Podía leer en sus ojos: Es hombre muerto. Supe entonces que debía tomar una decisión.

¿Qué hiciste pregunte? Pepe me dijo: Bueno, uno de los médicos me preguntó si era alérgico a algo, y respirando profundo grité: Si a las balas. Mientras reían, les dije: estoy escogiendo vivir, opérenme como si estuviera vivo, no muerto. Pepe vivió por la maestría de los médicos, por su sombrosa actitud y por la gracia de Dios.

Aprendió que cada día tenemos la elección de vivir plenamente. La actitud, y la fe en Dios finalmente lo es todo. Al final la decisión de cómo te ves, cómo te sientes, cómo vives la vida, la tienes tú. Sólo aquellos que dejan de ver la parte positiva de sus resultados y de la vida. Son los que se frustran”.

Vive la vida como si hoy fuera el último día de la misma, haciendo el bien y portándote como lo que eres, un ser racional, que puedes tomar la decisión de hacer el bien o hacer el mal.

Termino con este pedazo de la 1era. Carta de Pedro Capitulo 3, Versículo 4, que dice así: “Que irradie de lo intimo del corazón la belleza que no se pierde, es decir un espíritu suave y tranquilo que es el más precioso tesoro a los ojos de Dios”.

Hasta la próxima y muchas bendiciones para todos.

Comenta con facebook