Por Carolina Cepeda
SANTO DOMINGO.- Alarma ha causado entre especialistas y algunos ciudadanos que un 49 por ciento de los padres dominicanos entiende que el castigo físico es la forma correcta para criar a sus hijos.
La información fue dada a conocer tras una investigación realizada por la Organización cristiana internacional World Vision.
Al menos un 36 por ciento de los adolescentes en el país experimentó violencia física durante los últimos 12 meses, según reveló el estudio sobre protección y salud de la niñez de la Organización World Visión.
La situación, que se atribuye al encierro por la pandemia del covid-19, es una práctica errónea de acuerdo a especialistas.
El castigo físico no es un lenguaje, no es una metodología, no es una herramienta, es un símbolo de dolor, de maldad, es guardar en la memoria elementos negativos que no ayudan al desarrollo sano ni a la salud mental de nuestros niños, niñas y adolescentes.
El informe dejó en evidencia que casi la mitad de los padres, madres o tutores entiende que al castigar con tortura física y humillante a los menores logran una mejoría en su conducta. Sin embargo, expertos señalan los riesgos que implica esta acción.
Van a presentar trastornos de ansiedad, trastornos depresivos, trastornos del sueño, baja autoestima, bajo rendimiento académico, conducta agresiva con la autoridad y también no van a desarrollar los recursos necesarios para enfrentar la resiliencia y poder enfrentar la adversidad cuando sean adultos.
Yo no creo que para corregir hay que pegar, pero algunas veces hay que darle su pelita a los niños para que se ajusten. La mano dura corrige.
Hay muchas formas de gastigarlos, no es solamente dandoles golpes. Una table, la televisión, lo que sea, lo tranca en la habitación.
La investigación reveló además que el 78 por ciento de los adolescentes consultados dijo no sentirse escuchado, por lo recomiendan crear programas para que estos puedan expresarse.
Deben dirigirse básicamente a cuáles son sus intereses. Pensamos que sus intereses van más a hacia lo artístico y cultural o a lo recreativo, pero también hacia la tecnología. Y también llevar acciones que les puedan permitir a ellos participar atendiendo sus capacidades no sus discapacidades.
En el trabajo de investigación, fueron encuestados 385 jefes de familia, 770 adolescentes y jóvenes, y 385 niños y niñas. Tomando en cuenta las provincias Bahoruco, Dajabón, El Seybo, Independencia, Montecristi, San Cristóbal y el Gran Santo Domingo; cubriendo los municipios de Haina, Punta de Villa Mella, entre otros.
Nosotros siempre recomendamos buscar ayuda de un psicólogo o un terapista familiar, nuestros niños necesitan amor y paciencia para poder llevar un camino tan largo que es la adolescencia, la niñez y la infancia.
El asesor nacional de protección e incidencia de esta organización, Johnny Bidó, dijo que están trabajando para implementar una metodología de Crianza con Ternura, que permitirá entrenar a los miembros de la familia en una nueva dinámica fundamentada en la tierna protección de la niñez.
NIÑOS Además, realizan un programa de participación y liderazgo juvenil, dirigidos a fortalecer las capacidades de los adolescentes y jóvenes en todos los municipios.