Desde muy pequeña, he tenido una gran sensibilidad por las artes plásticas y visuales. Hace un mes, mi madre sacó el primer cuadro que hice cuando tenía alrededor de cinco años para competir en un concurso de para hijos de empleados del BID.
Cuando ví ese cuadro, después de tantos años, tuve lo que según describen los libros, una revelación. Fue tanta la emoción que causo en mi, que duré horas sin poder contener mi llanto y una alegría que creo nunca antes había sentido. El cuadro conjuga todo lo que siguen siendo los diseños que conceptualizo pintando hoy día, aunque en ese momento aún no había descubierto la armonía de incluir tonos metálicos, flores y fragancias, como implemento ahora en especial que tengo a mis amigos Johnny Bonelly y Alexandra Germán de consultores.
Ahora que me he independizado como empresaria y consultora para proyectos que implementen el uso de colores y fragancias, despertarme todos los días y tener ese cuadro en frente me motiva a no dejar nunca de luchar siempre por fomentar la belleza de lo colorido, lo cambiante y lo que fluye como el agua del Mar Caribe y nuestros más bellos ríos.
Recomendación de la semana: Sigan mis eventos hoy, el domingo y el martes por mis redes. Estaré trabajando con grandes visionarios que me ayudan a ser mejor, para ser mejor para nuestro país e ideas.
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