SANTIAGO DE CHILE.– El Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe de la Cepal informó hoy que al menos 1.678 mujeres fueron asesinadas por razones de género en América Latina el pasado 2014.
Según un comunicado, los feminicidios afectaron a catorce países de América Latina, y tres del Caribe, cifra que se da a conocer a un día de la celebración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
La secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Alicia Bárcena, señaló que «no podemos permitir que sigan muriendo más latinoamericanas y caribeñas por el solo hecho de ser mujeres».
Bárcena también advirtió que los países de la región deben mejorar sus registros administrativos para conocer el número de feminicidios e impulsar programas de prevención y reparación de las víctimas con un presupuesto adecuado.
«El abuso perpetrado en la calle y en el sistema de transporte en las ciudades es una de las formas más minimizadas y naturalizadas de la violencia contra las mujeres», sentenció en un informe la secretaria de la ONU.
La Cepal considera el feminicidio como la expresión más dramática de la violencia contra las mujeres y advierte que «debe ser enfrentada íntegramente por los Estados, considerando los factores de desigualdad económica, social y cultural que operan en las relaciones de poder entre hombres y mujeres.
Veinte países de América Latina y el Caribe cuentan actualmente con leyes de violencia contra las mujeres, aunque solo en ocho se asignan recursos específicos en su presupuesto nacional.
De igual forma, catorce países han tipificado el delito de feminicidio y dos lo han establecido como un homicidio agravado por razones de género en su legislación.
Perú fue el primer país en promulgar, en marzo pasado, una ley para prevenir y sancionar el acoso sexual en espacios públicos, mientras que Argentina, Chile y Paraguay se encuentran tramitando leyes sobre el acoso callejero.
Sobre el acoso en la política, Bolivia es el único país de la región que aprobó hasta ahora una ley contra el acoso y violencia política contra las mujeres, mientras que en Costa Rica, Ecuador, México y Perú, están discutiendo leyes similares.
Como parte de las iniciativas para luchar contra los feminicidios, la Secretaría General de las Naciones Unidas, junto a la Cepal, inauguró en Santiago de Chile los 16 días de activismo de la campaña llamada ÚNETE, que busca poner fin a la violencia contra las mujeres.
La sede de la Cepal, localizada en la capital chilena, fue intervenida para «sensibilizar a la sociedad frente a este flagelo contra los derechos humanos de las mujeres y el desarrollo de los países», sentenciaron.