Jartum.- Informaron hoy fuentes sanitarias, que aproximadamente 167.000 mujeres embarazadas se enfrentan a la hambruna, deshidratación y a una atención médica limitada tras verse forzadas a huir de la ciudad de Wad Madani, capturada por los paramilitares en el estado de Al Yazira y considerada un refugio para los desplazados de la guerra en Sudán.
El Sindicato de Médicos de Sudán dijo en un comunicado que estas miles de mujeres se desplazaron a los estados de Sennar y Gedaref, y se enfrentan a «graves peligros durante los desplazamientos que afectan la salud tanto de la madre como del feto».
El sindicato prevé que unos 30.000 niños nacerán en los próximos tres meses en Sudán, sin acceso a una atención médica adecuada, como servicios básicos de vacunación, lo que aumenta el riesgo de complicaciones de enfermedades infantiles endémicas.
Afirmó que la guerra en curso desde abril pasado ha provocado «la mayor crisis de desplazamiento de niños en el mundo».
Casi 3,5 millones de niños se vieron obligados a huir de sus hogares en Jartum y las regiones de Darfur y Kordofán, y ahora de Al Yazira, en el centro del país, como resultado de las hostilidades del mes pasado que llevaron a que los paramilitares de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) arrebataran esta región al Ejército sudanés.
La guerra en Sudán ha causado ya alrededor de 12.000 muertos, y siete millones de refugiados.