REDACCIÓN.-Monseñor Víctor Masalles ha desvelado en una entrevista nuevos e interesantes datos sobre su ‘no’ fichaje por la archidiócesis de Barcelona.
La Santa Sede hizo público el pasado 12 de septiembre que el Papa Francisco había aceptado la renuncia del obispo español Víctor Masalles de 62 años, como obispo de Bani, en República Dominicana.
El propio Masalles informó a través de sus redes sociales que tras renunciar como obispo vendría a España, en concreto a Barcelona, donde sería acogido por el cardenal Omella.
Tan solo un par de semanas después, monseñor Víctor Masalles compartió un comunicado a través de sus redes sociales en donde anunció que «situaciones no esperadas han provocado que deba discernir sobre la conveniencia de comenzar una nueva etapa pastoral fuera de la República Dominicana».
El obispo emérito de Bani afirmó que «tras pasar algunos días en España y luego de reflexionar serenamente, he resuelto volver a la República Dominicana donde pienso iniciar un periodo sabático que seguramente será para mí de mucha ayuda para los tiempos actuales».
Masalles señala a Omella
Ahora, tres meses más tarde el obispo desvela algunos detalles sobre esas «situaciones no esperadas» que le obligaron a volverse a República Dominicana con una mano delante y otra detrás.
Masalles cuenta en la entrevista que fue «invitado a renunciar» para ir a Barcelona y después… «ni Barcelona ni nada y quedé fuera . Yo todavía no puedo decir que fue por algo porque ni siquiera sé por qué fue pero ahora soy emérito a los 62 años».
«Imagina lo doloroso que cuando se anuncia que se voy a España, allí dicen que no, que es mentira», explica el obispo de origen catalán. Víctor Masalles narra como en República Dominicana se dio todo tipo de conjeturas. Masalles apunta indirectamente al cardenal Omella de estar detrás de todo esto al afirmar que «el que me acogía fue el que redactó mi propia renuncia y redactó el comunicado para renunciar ante la prensa».
El obispo emérito de Baní deja caer que tuvo que decidió renunciar por presiones tanto de dentro como de fuera de la Iglesia en República Dominicana. Fue entonces cuando su director espiritual le puso en contacto con el arzobispo de Barcelona, el cardenal Omella.
Masalles defiende que el ambiente en República Dominicana estaba «muy enrarecido» y estaba «pasando dificultades y esa acogida (ir a Barcelona) me dio a mí como una luz en el túnel porque allí tengo a mis 27 primos hermanos. El obispo Víctor Masalles desvela que «parece que en medio de esto también tienen que ver personas de este país (República Dominicana) cercanos a mí que se ocuparon de que no fuera recibido allí».
El obispo agrega que todo esto fue «muy doloroso porque uno queda en el aire, queda desprovisto pero lo peor de todo es no saber por qué». En ese sentido, dice haberse sentido como si un coche le atropellase y siguiera de largo. «Nunca me enteré quién me atropelló ni nada pero bueno esto forma parte de la vida una prueba confío en el Señor y amo a la Iglesia» pero «nunca pensaría en que todo este tipo de conjeturas sale de ahí una vez que yo digo que me voy y después que no me voy que todo el mundo dice que era mentira y me mandan a guardar silencio», concluye el emérito de Baní.
En la entrevista que dura cerca de una hora y media, el obispo Víctor Masalles dice en varias ocasiones que ha sido ‘misericordiado’. Cabe señalar que este obispo fue quien más se enfrentó contra el Gobierno y dio la cara en la defensa por la vida y luchó para que no se aprobara el aborto en República Dominicana.