En estos momentos en este país estamos viviendo situaciones difíciles por la inseguridad ciudadana que atravesamos en estos tiempos. Ya no podemos salir ni de noche ni de día, ni en vehículos ni a pie alas calles, porque los delincuentes están al asecho, para despojarnos de nuestros bienes y el que se resista corre el riesgo de ser asesinado.
Mientras pasan los días, la situación se va agravando y el pueblo se abstiene de asistir a los sitios de diversión tales como los cines, los parques deportivos, los restaurantes y las playas, por temor a los delincuentes, que no solo son dominicanos, sino también de otras nacionalidades que están aquí como inmigrantes, la mayoría ilegales.
No entendemos por qué las medidas adoptadas por las fuerzas de seguridad, tanto la Policía como el Ejército Nacional, hasta ahora no han resuelto el problema, porque vemos con estupor como la delincuencia se va incrementado cada día en todo el país.
Se ha llegado al colmo, que es mucho decir, que la Defensora del Pueblo, Zoila Martínez Guante, no encontró quien la defendiera cuando unos maleantes le arrebataron su yipeta y la golpearon cuando se disponía a regresar a su vivienda ubicada en la capital.
Todo ocurrió cuando la funcionaria salía de un cine en esta ciudad y según se informó fue interceptada por unos delincuentes que la acorralaron y le arrebataron la llave del vehículo, bajo amenazas, y escaparon.
Ella quedó en estado de shock. No quiso hablar del tema con la prensa. Estaba nerviosa, pero dando gracias a Dios de que la dejaron con vida. Luego del atraco, Martínez Guante fue atendida por un cuerpo de médicos, para contactar que se encontraba bien de salud.
Ante esta terrible situación que estamos hoy viviendo aquí, al único que podemos acudir, con toda confianza, para que nos defienda, no es a los hombres, sino a nuestro Dios y Padre de nuestro Señor Salvador Jesucristo, por lo que tenemos que hacer, lo mismo que el Salmista David que decía: “Alzaré mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene de Jehová que hizo los cielos y la tierra”, Salmos 121:1-2.
No hay duda que ante esta situación de inseguridad, solo Dios y nadie más, es el único que nos puede defender: “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo, yo te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia, Isaías 41:10.
No perdamos la fe en nuestro Dios y Señor Jesucristo, porque como dice en Isaías 54:17, “Ninguna arma forjada contra ti prosperará, y condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Esta es la herencia de los siervos de Jehová, y su salvación de mí vendrá, dijo Jehová”.
Ahora mismo quién es el único que puede defender al pueblo dominicano de esos demonios que viven atracando, asaltando, matando, violando, robando en casas habitadas y estafando a diestra y siniestra, solo «Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. Salmo 46.:1; y “El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente. Diré yo al Señor: “Mi refugio y mi fortaleza, mi Dios, en quien confío.” Porque él te librará del lazo del cazador, de la peste destructora”. Salmo 91:1-3.
Así que si tú confías en Dios, “el Señor te guardará de todo mal, él guarda tu vida. Jehová guardará tu salida y tu entrada desde ahora y para siempre. Salmo 121:7-8. “Y el Señor me librará de toda obra mala, y me preservará para su reino celestial. A él sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén”. 2 Timoteo 4:18.
Apreciado amigo o amiga, en este momento difícil en que estamos viviendo en el país, tú puedes decirle a Dios en oración “Si anduviere yo en medio de la angustia, tú me vivificarás; Contra la ira de mis enemigos extenderás tu mano, Y me salvará tu diestra” ,Salmo 138:7.
Fuente: La Biblia.