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Batalla Electoral 2024

“Ya no me Preocupo”

Un cordial saludo a todos mis queridos lectores.

Ya estamos casi en la mitad del año, el tiempo pasa volando como comúnmente decimos. Estamos ya en el mes de Mayo y el domingo 31 celebraremos el día de las madres. Hay muchos que todavía ellas viven aquí en la tierra, y otros como yo que están vivas, pero en el cielo junto y disfrutando de la presencia de Cristo. Para aquellos que la tienen y están gozando de las caricias de ellas ámenlas y mímenlas porque cuando ya no la tengan, como yo la van a extrañar muchísimo, pero ya va a ser muy tarde, solo nos queda el consuelo de saber que están disfrutando de esa promesa eterna que es ver a Dios cara a cara y tal y como El es.

Una verdadera madre es aquella que nos deja aprender a volar solos, que siempre va a estar preocupada por nosotros porque somos sus hijos, pero que nos va a preparar para que nos enfrentemos a la vida, para que sepamos hacer esas cosas cuando ellas ya no estén con nosotros, ahora depende de nosotros si queremos aprender o no.

Hay algo que quiero compartir con todos Ustedes y que lo firma una madre feliz, y que lleva por titulo: Escrito de una madre, y dice así: Mi mamá tenia muchos problemas. Había estado ganando peso y perdiendo el pelo. No dormía, se mordía las uñas y los dientes le rechinaban, Era irritable, gruñona y amargada, hasta que un día, de pronto ella cambio. La situación estaba igual, pero ella era distinta. Cierto día, mi papa le dijo: Vieja, llevo tres meses buscando empleo y no he encontrado nada, voy a tomarme una cervecitas con mis amigos. Mi mamá le contestó: Está bien, tomando cerveza lo vas a encontrar. Mi hermano mayor le dijo: Mamá, voy mal en todas las materias de la Universidad. Mi mamá le contesto: Está bien, ya te recuperarás, y si no lo haces, pues repites el semestre, pero tú pagas la matricula. Mi hermana le dijo: Mamá choque el carro, Mi mamá le contesto: Esta bien hija, llévalo al taller, busca cómo pagar la cuenta y mientras lo arreglan, movilízate en la OMSA, en un carrito o en el metro. So nuera le dijo: Suegra, vengo a pasar unos meses con ustedes. Mi mamá le contestó: Está bien, acomódate en el sillón de la sala y busca unas cobijas en el clóset. Todos en casa de mi mamá nos reunimos preocupados al ver estas reacciones. Sospechábamos, que hubiese ido al medico y que le recetara unas pastillas de Molondrón de 1.000 Miligramos, para todo le resbalara. Seguramente también estaba ingiriendo una sobredosis. Propusimos entonces hacerle una intervención a mi mamá para alejarla de cualquier posible adicción que tuviera hacia algún medicamento enojo. Pero cuál no fue la sorpresa, cuando todos nos reunimos en torno a ella, y mi mamá nos explico: Me tomo mucho tiempo darme cuenta de que cada quien es responsable de su vida, me tomo muchos años descubrir que mi angustia, mi mortificación. Mi depresión, mi coraje. Mi insomnio, y mi estrés, no resolvían sus problemas sino que agravaban los míos. Yo no soy responsable de las acciones de los demás, pero si soy responsable de las reacciones que yo exprese ante eso. Por lo tanto llegué a la conclusión de que mi deber como madre, es enseñarles a que tomen sus propias decisiones, enseñándoles yo a hacer lo que es debido y bueno, pero que ustedes decidan. He tomado cursos de yoga, de desarrollo humano, de higiene mental, de vibración y de programación neurolinguistica, y en todos ellos, encontré un común denominador: finalmente todos conducen al mismo punto, y es que yo sólo puedo tener ingerencia sobre mí misma, ustedes tienes todos los recursos que yo les he enseñado para resolver sus propios problemas y su propias vidas, yo solo podré darles mi consejo si acaso me lo piden, y de ustedes depende seguirlos o no.

Así que, desde hoy en adelante, yo dejo de ser el receptáculo de sus responsabilidades, el costal de sus culpas, la lavandera de sus remordimientos, la abogada de sus faltas, el muro de sus lamentos, la depositaria de sus deberes, el resuelve de sus problemas, o su llanta de repuesto para cumplir sus responsabilidades. A parir de ahora los declaro a todos adultos independientes y autosuficientes con todo lo que les he enseñado. Todos nos quedamos mudo ante su respuesta. Desde ese día la familia comenzó a funcionar mejor, porque todos en la casa saben exactamente lo que nos corresponde hacer, pues nuestra madre hace mucho tiempo no los había enseñado.

Mis hermanos, la madre o el padre que crían los hijos para ellos, mas tarde ellos tendrán problemas. Tenemos que criarlos para el mundo que les va a tocar vivir, Nosotros somos pasajeros y peregrinos en este mundo, un día no estaremos aquí para ayudarles, y tienen que tomar las herramientas que nosotros les enseñamos a utilizar. Enséñenosle  sobre todo a amar a Dios y a orarle a El, pues lo único que cambia nuestra forma de ver las cosas y el mundo es la oración.

Quiero hacerles llegar a todas las madres en este día un fuerte abrazo.

Termino con el Versículo 6 del Capitulo 22 del libro de los Proverbios que dice: “Enseña al niño el camino que debe seguir, y cuando sea viejo no se apartará de él”.

Hasta la próxima y muchas bendiciones para todos.

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