Un cordial saludo a todos mis queridos lectores.
Como aquel que dice, hace unos cuantos días que comenzó el año y ya vamos por el mes de Abril, cuatro meses que han pasado volando. Ya dentro de una semana llegaremos a la Semana Mayor para nosotros los cristianos, la Semana Santa.
Semana que yo en mi humilde opinión creo que muchos la deberían llamar parranda santa. Porque es la semana en que muchísimas personas se aprovechan para salir de juerga con los amigos, para irse a la playa con la familia, para reunirse en su campo con el resto de sus seres queridos, para descansar y así jugar un poco de domino mientras se toman unas cervecitas bien frías, hasta famosos conciertos se dan en esa semana y así muchísimas otras cosas mas. Vivimos tan apurados que tal parece que el mundo se va a acabar en tres semanas y queremos aprovecharlo hasta lo ultimo antes de que suceda.
Me recuerdo cuando yo era un muchacho, era una semana de recogimiento, una semana para reflexionar y hasta para proponernos enderezar un poco el rumbo de nuestras vidas, desafortunadamente se ha ido perdiendo con el pasar del tiempo esa mística, por eso decía al comenzar que muchos bien pudieran llamarla parranda santa.
Es que no nos damos cuenta que tenemos 51 semanas al año mas que nos regala el buen Dios para disfrutar junto con la familia, yo personalmente, no creo que no tenemos que esperar la Semana Santa para disfrutar de la playa en un hotel con la familia, para jugar domino y tomarnos unos tragos o para irnos a nuestro campo, eso lo podemos hacer cualquier semana del año, especialmente en los meses de Julio y Agosto que es cuando nuestro hijos están de asueto en la escuela, y así aprovechar más la Semana Santa, para fortalecernos en la fe, y cambiar el rumbo de nuestra vida, que a veces esta un poco fuera de foco.
Créanme que no soy un mojigato, santurrón o cosa por el estilo. Me gusta bailar, divertirme, disfrutar con mi familia, tomarme mi buena copa de vino o uno que otro trago, pero realmente pienso que ese no es el fin de la Semana Santa, creo que no debemos esperar a la misma para hacerlo y que en nuestros centros de trabajo y nuestras escuelas no nos dieron unos días libres para asueto personal. La finalidad de la Semana Mayor es para recordarnos a todos los que creemos en Cristo el sacrificio de amor tan grande que hizo Él al entregar su vida por todos nosotros sin distinción de raza, credo o nacionalidad.
No abandonemos en esta Semana Santa a aquel que nos espera en la Cruz día tras día, los 365 días del año con sus brazos bien abiertos para darnos un gran abrazo de resurrección, y que así resucitemos el Domingo de Pascua transformados juntos con Él.
Termino con las palabras del mismo Jesús y que se repiten cada año en el Sermón de las Siete Palabras: “Perdónalos Padre porque no saben lo que hacen”
Hasta la próxima, y una feliz Pascua de Resurrección llena de muchísimas bendiciones para todos.