Islamabad.- Al menos diez presuntos terroristas murieron este martes en un operativo contra la insurgencia llevado a cabo por las fuerzas de seguridad del país en el norte de Pakistán, informó el Ejército.
La operación se produjo en el distrito de Tank, en la provincia norteña de Khyber Pakhtunkhwa, informó en un comunicado la oficina de comunicación del Ejército paquistaní (ISPR, en inglés).
Durante el operativo «se produjeron intensos tiroteos entre tropas propias y terroristas. En consecuencia, diez terroristas fueron enviados al infierno», agregó ISPR.
El Ejército paquistaní indicó que los presuntos insurgentes estaban involucrados «en numerosas actividades terroristas contra las fuerzas de seguridad, así como en la extorsión y el asesinato de civiles inocentes».
Durante la operación las fuerzas de seguridad paquistaníes incautaron además numerosas armas, municiones y explosivos.
Pakistán experimenta un aumento de la violencia armada desde la llegada al poder de los talibanes afganos a Kabul en agosto de 2021, que reactivó los ataques de sus hermanos ideológicos paquistaníes, especialmente en las provincias fronterizas con Afganistán de Khyber Pakhtunkhwa y Baluchistán.
El país asiático fue testigo de 271 ataques durante la primera mitad del año, en los que 389 personas fallecieron y otras 656 resultaron heridas, según un informe publicado a principios de julio por el Instituto de Estudios de Seguridad y Conflictos de Pakistán.
Se trata de un incremento significativo de las cifras en comparación al mismo periodo de 2022, cuando Pakistán sufrió 151 ataques que causaron 293 muertos y 487 heridos.