Por Sandy Cuevas
SANTO DOMINGO.- Ante las revelaciones de que la empresa Karpowership, que explota la posibilidad de instalar una planta eléctrica flotante en Boca Chica, enfrenta denuncias por corrupción en tres países, las autoridades de ese municipio aclaran que no son las responsables ni de investigar a la compañía ni de dar la autorización final.
Luego que el cabildo de Boca Chica emitió una resolución para manifestar su “no objeción” del proyecto, pese a la oposición de diversos sectores del municipio, el alcalde de esa demarcación aclara que los responsables de investigar el origen y trayectoria de la compañía son las autoridades energéticas.
Según diversos medios de comunicación extranjeros, el grupo Karadeniz, propietario de Karpowership, ha sido sometido por corrupción y el pago de sobornos para conseguir contratos en Sudáfrica, Paquistán y Líbano.
El edil Fermín Brito insiste que por el monto la compañía sólo cuenta con una concesión para realizar las investigaciones sobre la viabilidad del proyecto, para lo cual cumplió con los requisitos y trámites.
Además de los cuestionamientos por corrupción, el proyecto energético enfrenta el rechazo de los diversos sectores de Boca Chica, que temen SE genere contaminación y ahuyente el turismo.
Aunque no quisieron hablar frente a las cámaras, administradores de los clubes náuticos indicaron que no fueron consultados para tomar la decisión y lamentan que, de concretarse el proyecto, la barcaza empañaría la vista del principal motor de la economía de la demarcación.
La Comisión Nacional de Energía otorgó en septiembre un permiso provisional para que la empresa peticionaria realice los estudios relativos a la eventual construcción de la planta.
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