En barrios como Villa María y La Fuente, la población afirma que las noches se hacen insoportables. “No pegamos un ojo desde hace semanas”, dijo Ramón Morel, comunitario de la zona.
Santo Domingo.– Tras entrar en operaciones la unidad dos de Punta Catalina que estaba dañada, este lunes salió de servicio la unidad uno, lo que mantiene los apagones en distintos barrios del país y ha desatado la indignación de comerciantes y comunitarios, quienes advierten protestas en las calles.
En sectores como Villa Francisca, los comerciantes aseguran que cada día las interrupciones eléctricas se prolongan por horas, afectando sus ingresos y dañando mercancías. Muchos han tenido que trabajar con plantas eléctricas, lo que representa un gasto adicional de hasta dos mil pesos diarios en combustible.
“Los productos perecederos se me están dañando. Para mantener mi negocio abierto no me queda de otra que usar la planta”, expresó un comerciante del sector.
Vecinos como Ramona Báez narraron que la situación se ha vuelto insostenible. “Anoche tuve que amanecer en un parque junto a mis vecinos porque no aguantábamos el calor. Y aun así nos llega la factura normal”, denunció.
En barrios como Villa María y La Fuente, la población afirma que las noches se hacen insoportables. “No pegamos un ojo desde hace semanas”, dijo Ramón Morel, comunitario de la zona.
Desde la oposición, dirigentes del Partido de la Liberación Dominicana señalaron que la crisis eléctrica afecta a todo el país y responsabilizaron al Gobierno de no dar el mantenimiento adecuado a las plantas de generación.
De su lado, la Empresa de Generación Eléctrica Punta Catalina explicó que la unidad uno salió de operación por la obstrucción de sargazo en el sistema de captación de agua, lo que redujo la circulación del líquido.
Aseguraron que esta salida “no genera déficit en el sistema”, aunque en la práctica las interrupciones siguen golpeando a los sectores populares, donde la frustración crece cada día.