El ingeniero indicó que, de manera independiente a sus cualidades, la designación fue un error del presidente o un mal asesoramiento de su equipo y cuestiona su imparcialidad.
El ingeniero indicó que, de manera independiente a sus cualidades, la designación fue un error del presidente o un mal asesoramiento de su equipo y cuestiona su imparcialidad.
“Al margen de que sea estatal o privado, aunque la ley no lo prohíbe, a mí me luce que no es prudente que usted elija para poner como regulador, como el árbitro del sector eléctrico, a una persona que 24 horas antes de su nombramiento, un minuto antes, era una figura máxima como agente del sector, eso no procede", manifestó Castellanos.Para enfatizar su punto, el ingeniero explicó que la ley prevé un plazo de uno o dos años para que el superintendente de electricidad que ha cesado en sus funciones preste servicio a ningún agente del sector para evitar conflicto de interés. Por lo que consideró que, de manera independiente a sus cualidades, la designación fue un error del presidente o un mal asesoramiento del equipo del respresentante del Ejecutivo.
“Al margen de las cualidades que puede tener Astacio..., fue un error del presidente, mal asesorado, porque no debió poner una persona sacada, precisamente, de un ente que es actor del sector eléctrico para entonces ahora regular a todo el mundo. Creo que eso es un error", subrayó.Andrés Astacio fue nombrado en la Superintendencia de Electricidad mediante el decreto número 428-22 tras la renuncia de Rafael Velazco, luego de críticas al incremento de salarios en el sector en medio de la crisis marcada por la inflación y el aumento de las tarifas eléctricas por el desmonte gradual al subsidio de la energía. Aunque Bernardo Castellanos, de manera extraoficial, advirtió que la renuncia del anterior superintendente fue producto del impase entre las distribuidoras y el titular de Energía y Minas, en la que Velazco habría negado unas modificaciones a las licitaciones.