WASHINGTON.- El expresidente de Estados Unidos Bill Clinton (1993-2001) está respondiendo favorablemente al tratamiento contra la infección urinaria por la que tuvo que ser hospitalizado el pasado martes en el sur de California.
«Todos los indicadores de salud van en la dirección correcta y su recuento de glóbulos blancos ha disminuido significativamente», afirmó este viernes el portavoz de Clinton, Angel Ureña, a través de un comunicado.
Urueña explicó que el exmandatario permanecerá en el hospital al menos durante una noche más para continuar tomando antibióticos.
De acuerdo con el equipo del Centro Médico de la Universidad de California en Irvine, Clinton está en la unidad de cuidados intensivos por motivos de «seguridad y privacidad».
Un asistente, que habló en condición anónima, aseguró a los medios de comunicación congregados en el hospital desde la madrugada que Clinton, de 75 años, ha pasado la jornada leyendo, caminando y «bromeando» con los empleados del centro.
A pesar de que el expresidente fue ingresado el martes, su portavoz no confirmó la noticia hasta el jueves por la noche, un punto que encendió las alarmas sobre su estado de salud, ya que Clinton ha sufrido varios problemas cardíacos en el pasado.
En 2004 se sometió a un bypass cuádruple y en 2010 a otra cirugía cardiovascular, pero los médicos explicaron a la cadena CNN que el actual ingreso se debe a una infección del tracto urinario que derivó en una infección de sangre conocida como sepsis y que, si no se trata a tiempo, puede ser letal.
«El presidente Clinton fue llevado al Centro Médico UC Irvine y diagnosticado con una infección. Fue ingresado en el hospital para un seguimiento cercano y se le administraron por vía intravenosa antibióticos y fluidos», aseguraron los doctores Lisa Bardack y Alpesh Amin en un comunicado.
La portavoz adjunta de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, informó en un escueto mensaje de una llamada mantenida el viernes por la tarde entre Clinton y el presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
Antes, durante una visita a Connecticut, Biden comentó que, según la información que tenía, el expresidente estaba recuperándose.
«Él parece estar bien, si Dios quiere (se recuperará)», dijo Biden, de 78 años, mientras golpeaba la madera del podio presidencial con sus nudillos.
Clinton reside en Nueva York, pero el martes viajó a California para participar en un evento privado con su mujer y excandidata presidencial Hillary Clinton.
Una vez allí, comenzó a sentir nauseas y mareos, por lo que visitó el hospital y fue ingresado ese mismo día.
Hillary Clinton, por su parte, acudió a la cita en representación de la pareja y posteriormente se trasladó al hospital esta madrugada, donde varias cámaras captaron su llegada rodeada del fuerte dispositivo de seguridad que el Servicio Secreto estadounidense ha dispuesto en las inmediaciones del centro.