LONDRES.- El primer ministro británico, el conservador Boris Johnson, se niega a dimitir pese al aluvión de dimisiones y la creciente presión por parte de miembros de su Gabinete y de sus diputados, revelan este miércoles medios británicos.
El líder «tory», que está reunido en la sede del Gobierno en Downing Street -su oficina y despacho oficial- con sus ministros antes de decidir sus próximos pasos, no tiene ninguna intención de renunciar a su cargo y se muestra «absolutamente desafiante», filtró al canal «Sky News» una fuente del Ejecutivo
Esa fuente de Downing Street asegura que el dirigente conservador quiere «luchar» y puede hacer nuevos nombramientos hoy mismo después de que en las últimas horas más de 30 altos cargos de su Gobierno hayan dejado sus cargos en masa.
Diferentes medios revelan asimismo que un «desafiante» Johnson ha rechazado los llamamientos de sus colegas en el Gabinete para marcharse durante una reunión en la que se le ha comunicado que ha perdido la confianza del partido y se le ha trasladado que, de esta manera, no podría continuar en el cargo.
Según esto, los titulares del Interior, Priti Patel, Empresas, Kwasi Kwarteng, Transporte, Grant Shapps, y para Gales, Simon Hart, figuran entre los ministros que han pedido explícitamente a Johnson que se vaya.
Conforme a estas informaciones, Patel le ha sugerido que acate la «postura abrumadora» del grupo parlamentario, mientras que Shapps sostiene que Johnson tiene pocas opciones de ganar otra moción de censura interna y debería fijar un calendario para marcharse en sus propios términos.
No obstante, al parecer, Johnson habría rechazado las sugerencias que le conminan a buscar «una salida más digna» y ha indicado que luchará por su futuro político, algo que podría desatar aún más dimisiones de sus colegas del gabinete.
Una fuente cercana a Johnson reveló que este dijo a sus compañeros que habría «caos» si dimitiera y que el partido, casi con toda seguridad, perdería las próximas elecciones generales.