REDACCIÓN INTERNACIONAL .- Más de 2,000 migrantes originarios de Haití, Nicaragua, Honduras, El Salvador y de países de África realizaron un asentamiento improvisado en la ciudad mexicana de Tapachula, estado de Chiapas, fronteriza con Guatemala, en espera de sus documentos de tránsito legal por ese país.
Los extranjeros llevan acampando casi 48 horas frente a las oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), donde se reportó que asaltaron y entraron por la fuerza para ingresar al edificio, porque se han paralizado los trámites para solicitar asilo.
Las personas levantaron casas de campaña con mantas, sábanas y cartones, que sujetaron con cuerdas de plástico y vallas metálicas que sirven para protegerse del sol durante el día y de las ráfagas de aire por la noche.
Desde 2019, cuando arribaron cientos de migrantes africanos a Tapachula, no se habían formado campamentos de familias afuera de la Estación Migratoria Siglo XXI, lugar establecido por el Instituto Nacional de Migración (INM) de México para el alojamiento temporal a esas personas que no puedan acreditar su situación migratoria regular.
Al tiempo que varios grupos de unos 100 hombres, de varios países, se han estado entregando a las autoridades migratorias, para iniciar su proceso de refugio, además de revisar su situación legal en el país.
Las movilizaciones reflejan el flujo migratorio récord hacia Estados Unidos, cuya Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) detuvo en el año fiscal de 2022 un número inédito de más de 2.7 millones de indocumentados.
Además, la Comar recibió más de 118.000 peticiones de asilo en los primeros meses de 2022, el segundo año con más solicitudes en México desde que hay registro.
Migrantes
El nicaragüense Elison Huerta explicó a EFE que tomaron la decisión de permanecer en ese lugar porque todos los días llegan más personas y ocupan los lugares de atención.
«Somos una familia de cinco niños y tres adultos, estamos esperando desde hace cinco días, porque son varias listas de personas, los de migración llaman por la mañana a grupos todos los días y hay que ir esperando los turnos», relató.
Según este migrante centroamericano, solo esperan un oficio de salida de 30 días para luego tramitar la Forma Migratoria Múltiple (FMM) para poder tener una estancia legal en el país.
Ronald López, otro migrante de Nicaragua, dijo a EFE que en Tapachula han observado que atienden a miles de personas y es un proceso que tarda por lo que los extranjeros no deben de desesperarse y tomar autobuses a la primera oportunidad ya que todos los documentos deben estar registrados por el Gobierno mexicano.
«A la hora de abordar un autobús cuando están los agentes del INM se los entrego y si aparezco en el sistema voy bien, porque si me lo dieron el mismo día y me voy, no voy aparecer y me lo romperán en el primer retén», contó.
Señaló que llegó este martes al lugar alrededor de las 9.00 hora local y le informaron que lo atenderían por la tarde, ya que las autoridades están recibiendo a 100 personas, por lo que confía en que será atendido.