Cómo las cuarentenas y eventos cancelados salvan vidas, en una gráfica

CHICAGO, Illinois.- La principal incertidumbre en el brote de coronavirus en los Estados Unidos ahora es qué tan grande se volverá y qué tan rápido se expande. Nancy Messonnier, de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), dijo el 9 de marzo que «muchas personas en los Estados Unidos en algún momento, ya sea este año o el próximo, se expondrán a este virus».

Hasta el momento hay un total de 32 casos de COVID-19 en Illinois. Y mas de 1,200 en los Estados Unidos.

Sin embargo, la velocidad a la que se desarrolla el brote es muy importante por sus consecuencias.

Lo que más temen los epidemiólogos es que el sistema de atención médica se vea abrumado por una repentina explosión de enfermedad que requiere hospitalizar a más personas de las que puede manejar. En ese escenario, más personas morirán porque no habrá suficientes camas de hospital o ventiladores para mantenerlos con vida.

Es probable que se evite una inundación desastrosa de hospitales con medidas de protección que ahora estamos viendo más: cerrar escuelas, cancelar reuniones masivas, trabajar desde casa, poner en cuarentena, aislarnos, evitar las multitudes, para evitar que el virus se propague rápidamente.

Los epidemiólogos llaman a esta estrategia de prevenir un pico enorme en los casos «aplanar la curva», y se ve como la gráfica arriba.

«Aunque no se pueda reducir el numero total de casos, reducir la tasa de epidemia puede ser crítico «, comento Carl Bergstrom, biólogo de la Universidad de Washington por medio de Twitter, alabando la gráfica, creada por primera vez por los funcionarios del CDC.

Aplanar la curva significa que todas las medidas de distanciamiento social que ahora se están implementando en lugares como Italia y Corea del Sur, y en menor escala en lugares como Seattle y el condado de Santa Clara, California, no se tratan tanto de prevenir enfermedades sino de frenar la tasa de personas que se enferman.

El CDC recomienda que las personas mayores de 60 años y las personas con afecciones médicas crónicas, los dos grupos considerados más vulnerables a la neumonía grave por COVID-19, «eviten las multitudes tanto como sea posible».

Si eres joven y saludable, es tu trabajo seguir las medidas de distanciamiento social para evitar contagiar a otros y mantener la epidemia en cámara lenta.

Quedarse en casa ayuda a evitar que el sistema de salud de los Estados Unidos se sobrecargue.

En este punto, con la propagación del virus en los Estados Unidos, la principal prioridad es asegurarse de que el sistema de atención médica evite inundarse con pacientes muy enfermos que necesitan ventiladores y cuidados intensivos.

Pero una cosa que las personas pueden hacer para ayudar es quedarse en casa si no se sienten bien y, especialmente, si recibieron un diagnóstico formal de COVID-19 y seguir los consejos para la cuarentena. De esa manera, el sistema de atención médica de EE. UU. puede centrarse en los pacientes que realmente lo necesitan durante este brote.

Fuente: Univisión