Redacción Internacional.- Un tribunal alemán condenó el miércoles a 15 años de prisión a una auxiliar de enfermería con problemas psiquiátricos y que fue juzgada por apuñalar a cuatro residentes de un centro para personas con discapacidad.
La corte de Potsdam, en el este del Alemania, declaró que Inés Andrea R., de 52 años, es culpable de homicidio por la muerte de cuatro residentes y de intento de homicidio por herir a otras tres personas.
Este pronunciamiento está en sintonía con la argumentación de la fiscalía que describió el acto como de «una crueldad inmensa».
La acusada permanecerá en un centro psiquiátrico, donde está recluida desde su arresto.
Este incidente que conmocionó al país se produjo el 28 de abril. Entonces, la cuidadora apuñaló a dos hombres y a dos mujeres de entre 31 y 36 años. También resultaron heridas otras tres personas, una de ellas con lesiones graves.
La policía reportó que las heridas mostraron un modo de «violencia intensa y extrema» contra los pacientes que por su condición no podían defenderse.
El abogado de la mujer, Henry Timm, pidió al juez no declarar la responsabilidad plena a su cliente, que entonces estaba en un «túnel» y no podía controlar sus actos.
Sin explicar sus motivaciones, Inés Andrea R. expresó remordimientos y dijo que le cuesta creer que cometió estos actos.
«Lo siento realmente», afirmó la acusada.
La auxiliar, madre de dos hijos, uno de ellos discapacitado, contó que siempre quiso ser enfermera y que durante muchos años sufrió problemas psíquicos.
«Me acurrucaba en casa. Desde que tenía 5 años sentía una gran tristeza y miedo ante la vida», dijo.
El establecimiento, denominado Thusnelda von Saldern Haus, se especializa en la acogida y el apoyo a las personas con discapacidad física o mental, en especial ciegos y autistas.
Alrededor de 65 personas viven en esta estructura, que emplea a más de 80 personas.