SANTO DOMINGO.- A menos de una semana de la inauguración, del Corredor de la Charles de Gaulle y a pesar de los altercados e invidentes de violencia, usuarios afirman estar satisfechos con el servicio y no tener miedo de usar este medio de transporte que ha llegado para facilitarles la vida.
Sin embargo, las actitudes asumidas por los choferes de carro público de este nuevo corredor a diferencia de los otros dos en la Avenida Winston Churchil y Núñez de Cáceres dejan en ascuas a conductores de este nuevo servicio.
Luis Vargas, conductor de una de las rutas de este nuevo corredor en la avenida Charles de Gaulle que comenzó a operar desde el pasado lunes, asegura temer por su vida debido a hechos violentos como lanzar piedras a los nuevos autobuses. Denuncia además algunos choferes de carros públicos se le han acercado a amenazarlos por hacer su trabajo.
En tanto Edilberto Lendof, ex chofer de carro del concho en la ruta Churchill y actualmente pensionado, dice que la forma en la que están obligando a los conductores a dejar a operar en el nuevo corredor no es correcta y propone recurrir al diálogo con las autoridades para poder ser escuchados o incluidos en este nuevo proyecto.
Algunos de los desplazados operadores de la ruta de la Charles de Gaulle están preocupados por su estabilidad económica y prefieren que se llegue a un acuerdo para mantener su anterior esquema de trabajo en que eran sus propios empleadores.
Para justificar esta postura indican que a los choferes integrados al corredor para manejar los autobuses les pagarán salarios de 20 a 40 mil pesos, mientras diariamente esos reunían 2,000 pesos, lo que al mes ascendía a 60,000 pesos.
Personas que usan diariamente estos servicios desde su inauguración afirman sentirse protegidos y satisfechos con las comodidades de estos nuevos autobuses.
Pese a las revueltas que en ocasiones se han tornado violentas en este corredor, Cambita gerente general de Mochotran asegura seguirán extendiendo este tipo de proyectos a otras avenidas para el desarrollo del país.
