Por: Héctor de la Crúz
SANTO DOMINGO. – La propuesta para aumentar las tarifas de las multas, privar a los choferes de su licencia de conducir o declararlos en rebeldía es recibida con escepticismo por los conductores, quienes consideran que ninguna de esas medidas disminuiría las cifras de muertes por accidentes viales.
Manejar con prudencia no es un asunto de ley, sino más bien de responsabilidad, destacaron varios choferes que sí favorecen el cumplimiento de la legislación vigente y no su modificación.
La drasticidad de la ley que tenemos es lo que hace falta… No es cuestión de modificarla, porque si usted va a otro país, tienen la misma ley; aquí el problema es la permisividad.
Marilyn Azuaje, una mujer que trabaja como conductora, indicó que las autoridades deben verificar la capacidad de cada conductor y la funcionalidad de su vehículo para reducir los accidentes.
Hay gente que no sabe manejar; agarran un carro y simplemente avanzan. Para ellos no hay control o no se les hace cumplir la ley. Los motoristas deben estar todos al día, que tengan su licencia.
Algunos sí creen que aumentar las tarifas de las infracciones de tránsito ayudaría a disminuir el número de accidentes.
Al dominicano le duele el bolsillo, pero se debe aplicar a todos; no a uno sí y a otros no.
El costo de las multas varía según la infracción y entre las más frecuentes se encuentran conducir sin licencia o con el permiso vencido, que tiene un costo de mil pesos.
Conducir una motocicleta sin el casco protector también acarrea una multa de 1,000 pesos, así como tener la luz delantera o trasera quemada. Pasarse una luz roja o hablar por el celular mientras se conduce representa una multa de mil seiscientos sesenta y siete pesos.
Mientras se debate si se modifica o no la normativa, varios choferes dijeron que las autoridades deben empezar a buscar soluciones basadas en la ley actual.
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