SANTO DOMINGO.– El control medioambiental de la Central Termoeléctrica de Punta Catalina supera el de las centrales de carbón de países europeos como Alemania, aseguró su coordinador y presidente Celso Marranzini al participar en la entrevista central de El Despertador.
“Nosotros estamos muy por encima, o sea, el control nuestro es mucho mejor que cualquier central de carbón de las que están abriendo hoy en Alemania”, explicó el empresario al referirse a los resultados de un estudio sobre el impacto de la generadora en la población incluso de otras islas del Caribe.
Los resultados que sitúan a Punta Catalina a la vanguardia de los parámetros medioambientales de Europa son producto de la evaluación que cada seis meses realiza la empresa RINA, la cual, según Marranzini, es financiada por la administración de las plantas, pero que son reportados a los bancos europeos, que han condicionado su financiamiento con el cumplimiento del cuidado del Medio Ambiente por parte de la generadora.
Con esta explicación y basado en un estudio de la UASD que concluyó que el estudio del impacto proyectado de la central carece de base científica, el presidente del comité técnico de Punta Catalina volvió a restar importancia a dicho estudio y agregó que «nosotros nunca lo vimos» en las instalaciones de la generadora para realizar dicha investigación.
Asimismo, defendió la gestión del impacto ambiental de la CTPC al asegurar que miden el humo que sale de la chimenea, realizan labor social, así como un análisis del agua que entra y sale de las plantas.
Además resaltó el trabajo con las cenizas, al indicar que “el parque de cenizas es un manejo espectacular”, las cuales se van compactando y separando con lonas de poliestireno en forma de pirámides para luego sembar gramas sobre ellas, “ahí no hay contaminación de ningún tipo», aseguró.
Adelantó que los planes «en un futuro muy cercano es vender las cenizas a la cementera, porque se usa de materia prima».
Al recalcar que “todo desarrollo industrial tiene un impacto”, Celso Marranzini indicó que a diferencia del pasado, cuando se tiraban las cenizas sin ningún tratamiento científico, la planta ahora es «ambientalmente controlada».
El coordinador de Punta Catalina hizo referencia al estudio presentado por el Comité Nacional de Lucha Contra el Cambio Climático y auspiciado por el Centro de Investigación sobre la Energía y la Calidad del Aire de Filandia, que concluyó que fue un error que Punta Catalina operara con carbón, ya que emite micropartículas, dióxido de nitrógeno, dióxido de azufre, ácido, mercurio y otras sustancias tóxicas, que producirán unas 57 muertes prematuras al año, durante las próximas tres décadas, señalaron.
Además indicaron que la operación de la generadora afecta diversos cultivos en la zona, gran parte del territorio nacional, incluso sus efectos llegan hasta la vecina República de Haití y a las costas de Cuba y Jamaica.
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