Cuarta demanda contra la asociación del edificio que se desplomó en Miami

MIAMI.- Una nueva y cuarta demanda civil fue presentada contra la asociación de propietarios del edificio de apartamentos en Surfside (Miami-Dade) que se desplomó parcialmente la semana pasada y ha dejado hasta el momento 16 muertos y 147 desaparecidos.

Esta nueva demanda fue presentada este miércoles por familiares de Harold Rosenberg, que residía en la suite 211 y es una de las personas que permanecen desaparecidas tras el derrumbe del Champlain Towers South de esa ciudad aledaña a Miami Beach.

Junto a Rosemberg se encuentran también desaparecidos uno de sus hijos y su nuera, que se hallaban de visita, según el abogado que presentó la demanda, recogió el diario Miami Herald.

La reclamación fue interpuesta contra la Asociación de Condominios Champlain Towers South, Morabito Consultants y SD Architects e indica que la ciudad de «Surfside eventualmente será nombrada como demandada».

Las cuatro partes demandadas «ignoraron las señales de advertencia obvias e impactantes y las indicaciones de que una catástrofe era inminente», dice la demanda.

Agrega que los demandados supieron durante años, antes del colapso funesto, que el edificio Champlain Towers South «representaba una amenaza inmediata y grave para las vidas de los residentes y ocupantes del edificio, pero no tomaron las medidas necesarias para proteger a los ocupantes del edificio.»

MÁS DEMANDAS POR IMPRUDENCIA Y NEGLIGENCIA

El lunes pasado fue presentada otra demanda en nombre de Raysa Rodríguez, que vivía en el noveno piso de la torre de apartamentos y otros residentes de la parte del edificio que se desplomó en cuestión de segundos.

Más de 50 unidades del total de 136 con que contaba el edificio quedaron reducidas a escombros, cuando se cumple el séptimo día consecutivo para encontrar supervivientes bajo los escombros.

Alega esta demanda colectiva civil que la asociación de propietarios tenía la obligación de haber mantenido el edificio residencial ubicado en primera línea de playa en buenas condiciones de seguridad y funcionamiento.

Medios locales recogen que, según la demanda presentada en un tribunal del condado de Miami-Dade, la asociación del condominio actuó de manera «imprudente y negligente» en el mantenimiento del edificio derrumbado.

Precisamente, el martes se supo que en abril de este año la presidenta de esta asociación informó a los residentes en una carta que el deterioro del hormigón armado, ya detectado por una firma de ingenieros en 2018, estaba avanzando de manera significativa, por lo que urgía reparaciones que ascendían a 15 millones de dólares.

«El deterioro del hormigón se está acelerando», dice la carta a la que tuvo acceso Efe.

En la denuncia, Rodríguez relata la carrera frenética por el pasillo para escapar del edificio al darse cuenta de que parte del edificio se había desplomado.

«Llamé a las puertas de varios vecinos, sin obtener respuesta, corrí hacia la salida y, al abrir las puertas que conducen a la escalera exterior, vi la devastación», señala la mujer.

En su momento la demanda era la tercera presentada en una corte de Miami-Dade desde el colapso, cuyas causas, aún no determinadas, se encuentran bajo investigación y mientras los rescatistas buscan, por séptimo día consecutivo, supervivientes bajo los escombros.

DAÑOS ESTRUCTURALES DEL EDIFICIO

La demanda alega que la asociación no abordó las obras para subsanar los «daños estructurales importantes» descritos en un informe realizado en 2018 por la firma de ingeniería Morabito Consultants en la que advertía de un daño estructural importante.

Señala también que el «material inadecuado usado durante la construcción del edificio» pudo haber influido en el derrumbe del ala del edificio, además del peso del equipo de construcción y utilizado para volver a techar recientemente el edificio.

La segunda demanda fue presentada el sábado pasado en nombre de Steve Rosenthal, que residía en la suite 705 del Champlain Towers South.

La demanda de Rosenthal se produjo días después de que se presentara una demanda colectiva de 5 millones dólares en nombre de otro residente, Manuel Drezner, y «en nombre de todos los demás en situación similar».

Esa denuncia también alega que la asociación de condominios no «aseguró y protegió la vida y la propiedad» de quienes viven en el edificio.