Deepfakes hiperrealistas: Tips para reconocerlos antes de caer en el gancho

La inteligencia artificial ya puede imitar rostros y voces con precisión inquietante. Aprenda a detectar estos montajes antes de que lo engañen en un grupo de WhatsApp o lo usen para difundir mentiras

Santo Domingo.- En un país donde las redes sociales se han vuelto parte esencial de la rutina diaria, desde el grupo de WhatsApp familiar hasta los reels de Instagram, cada vez es más difícil saber qué es real y qué no.

Hoy en día, cualquiera puede ver un video de un político, artista o figura pública diciendo o haciendo algo sorprendente y asumir que es verdad. Pero, ¿y si ese video es falso? Ahí es donde entran los deepfakes hiperrealistas, una tecnología tan avanzada que pone en jaque a cualquiera, hasta al más desconfiado.

Estos videos generados con inteligencia artificial imitan de forma casi perfecta la voz, gestos, movimientos faciales y expresiones de una persona real. En otras palabras, pueden engañar incluso al ojo más entrenado. En países como República Dominicana, donde la desinformación se mueve rápido y donde lo viral a menudo se comparte sin verificar, aprender a reconocer un deepfake es una herramienta de supervivencia digital.

¿Y cómo uno se da cuenta que es un deepfake?

Aunque parezcan reales, los deepfakes dejan pistas. Aquí algunas señales para estar alerta:

¿Qué hacer si sospechas de un deepfake?

En lugar de compartirlo de una vez por WhatsApp o subirlo al Facebook con el clásico “miren esto”, sigue estos pasos:

  1. Verifica la fuente: ¿De dónde salió el video? ¿Lo publicó un medio reconocido o una cuenta anónima?
  2. Consulta medios confiables: Si es una figura pública, medios serios ya habrán confirmado o desmentido el contenido.
  3. Usa herramientas de verificación: Plataformas como InVID o páginas de fact-checking pueden ayudarte a analizar un video sospechoso.
  4. No lo compartas sin confirmar: Aunque te parezca curioso, compartir un deepfake puede alimentar la desinformación y causar daño a personas reales.

¿Por qué debería importarnos esto?

Porque los deepfakes no son solo entretenimiento o “cherchas digitales”. Se han utilizado para difamar personas, manipular la opinión pública y hasta estafar. En un contexto local, podrían utilizarse para afectar reputaciones, crear escándalos falsos o influir en procesos como elecciones o protestas sociales.

Además, en lo personal, cualquiera puede ser víctima. Imagina que usen tu rostro o tu voz en un video falso para dañar tu imagen o engañar a alguien de tu familia. Ya hay casos en otros países donde deepfakes han sido utilizados para extorsión o fraudes bancarios.

Una nueva forma de alfabetización

En esta era digital, reconocer deepfakes se ha vuelto tan importante como saber leer y escribir. No se trata de desconfiar de todo, pero sí de mirar dos veces antes de creer.

Los dominicanos son gente avispada, con buen olfato para detectar lo raro. Pero esta tecnología obliga a afinar aún más el ojo. La próxima vez que veas un video demasiado impactante, recuerda: ver no siempre es creer.

Y como se dice en los barrios, “antes de correr con el chisme, asegúrate que no sea un muñeco hablando por ti”.