REDACCIÓN INTERNACIONAL.- Actualmente se estima que un 80% de los pacientes con osteoporosis no reciben ni el diagnóstico ni el tratamiento correcto después de una fractura ya que la mayoría desconocen que la padecen.
En el marco del Día Mundial de la Osteoporosis, la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) advierte sobre los peligros de esta “enfermedad silenciosa”.
“La mayoría de las personas no saben que la padecen hasta que sufren una fractura de un hueso por una caída o un golpe menor”, indica María Cortés Berdonces, coordinadora del Grupo de Metabolismo Mineral Óseo de la SEEN.
Según estimaciones de la propia institución se calcula que el 80% de los pacientes con osteoporosis no reciben ni el diagnóstico ni el tratamiento oportuno después de una fractura.
Concienciación en el Día Mundial de la Osteoporosis
Las fracturas osteoporóticas provocan más días de hospitalización en las mujeres de 45 años que otras enfermedades, como puede ser el caso de la diabetes, el cáncer de mama o un infarto. Es más, el 24% de las personas que han sufrido una fractura de cadera muere el primer año.
“La osteoporosis es un importante problema de salud pública, y su consecuencia, la fractura, tiene un gran impacto en la calidad de vida del paciente y la morbimortalidad”, enfatiza la doctora Cortés Berdonces.
La experta insiste en la importancia de la concienciación social con respecto a esta enfermedad, porque para prevenir debemos conocerla en primera instancia.
Así, habla del “riesgo inminente“, esa probabilidad de sufrir una fractura sucesiva en los siguientes 6 ó 12 meses a una primera.
De una forma u otra, cada caso debe ser estudiado por un experto, que evaluará si existe o no alguna enfermedad que esté causando una mala calidad ósea, pudiendo de esta manera prevenir este tipo de fracturas.
Una enfermedad que pasa desapercibida
Fracturas de reducido impacto en una localización osteoporótica (vértebras, cadera, radio, pelvis y húmero) como:
La provocada por una caída desde la propia altura de la persona
Aquellas sin traumatismo
Por un golpe de tos
Por el levantamiento de peso
Estas fracturas se pueden originar por una mala calidad ósea y no siempre es detectada en las pruebas habituales, como la densitometría.
Pero el mayor peligro ya no es solo el infradiagnóstico, sino el hecho de que cada fractura osteoporótica aumenta hasta dos veces el riesgo de una nueva, independientemente de que con carácter previo se haya detectado una baja masa ósea, tal y como indica la experta de la SEEN.
Y es que aquellos pacientes con una fractura osteoporótica reciente más grave, como puede ser una fractura vertebral, de cadera, pelvis, húmero o radio, presentan un riesgo inminente de fractura en los siguientes 6-12 meses.
Este riesgo de fractura osteoporótica sucesiva es 4 veces mayor en fracturas vertebrales, sobre todo si son múltiples o más graves. Un factor por añadir a la ecuación será la edad, que lo hace aún más probable.
“El 25% de los pacientes mayores de 65 años con una fractura vertebral se volverá a fracturar en los dos primeros años”, indica la endocrinóloga .
Tratamiento
El tratamiento de una fractura osteoporótica siempre variará en función de la localización. Será el traumatólogo quien lo prescriba después de un estudio de metabolismo óseo adecuado.
En este sentido, debemos destacar la labor de las Unidades de Coordinación de Fracturas (FLS), servicios conformados por especialistas en metabolismo mineral óseo como endocrinos, reumatólogos, traumatólogos y rehabilitadores que identifican a aquellos pacientes con mayor riesgo de fractura.
Incidencia
La variable que se da con mayor frecuencia en la población es la osteoporosis postmenopáusica y senil, que afecta a un 22,5% de las mujeres. En el caso de los hombres, se estima que esta patología se sufre en un 6,8% de los mayores de 50 años.
Eso sí, aunque en menor medida, la osteoporosis también puede afectar a jóvenes.