El país enfrenta un déficit crítico en infraestructura de vivienda, agravado por desorden territorial
Santo Domingo.– Nuestro país enfrenta un déficit de infraestructura de décadas, especialmente en vivienda, agravado por un desorden territorial y un uso inadecuado de suelo. La gente construye en lechos de ríos secos, lo que causa tragedias cuando hay fenómenos naturales con las avenidas de los ríos.
La baja calidad del gasto público y la baja tributación, ya que la sociedad olvida que el desarrollo sostenible tiene un costo y todos tenemos que pagar. Este déficit es una deuda social y económica que se paga con creces en cada evento meteorológico que llega al país.
Hay que reconocerlo. Salvar vidas es la prioridad absoluta y el mayor éxito en una emergencia. Este trabajo de gestión de riesgo demuestra que es posible planificar y ejecutar acciones para minimizar el impacto natural de estos fenómenos.
El reto ahora es aplicar esa urgencia a la planificación territorial y a la inversión en obras vitales. Es crucial asumir el costo del desarrollo, ordenar el territorio y asegurar la alta calidad de la inversión pública.
No debemos esperar otra tragedia para recordar que la prevención y la infraestructura son la mejor póliza de seguro de la nación.