Estudiantes reciben docencia de bajo de un árbol.
SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El presidente de Acción para la Educación Básica (EDUCA) dijo que esta de acuerdo con el presidente Leonel Fernández, en que para educación no todo es dinero, pero precisó que para tener una campaña de formación que pueda competir con otras naciones es imprescindible contar con recursos.
Georges Santoni Recio destacó que en el caso de Costa Rica, el más cercano competidor en el DR-CAFTA que acaba de modificar su constitución para aumentar la asignación de educación de un seis a un ocho por ciento, contra un 1.98 que es lo que se planea dar en este 2011 en el país.
Al ser entrevistado por los periodistas Freddy Sandoval y Alex Jiménez en el programa En Primera Fila que se transmite diariamente de 7:00 a 8:30 de la mañana por el canal Antena 21, Recio aseguró que recortando de otros lugares para priorizar en educación se puede lograr cumplir con el mandato de Ley 66-97 sobre el 4%.
El presidente de EDUCA fue enfático al aclarar que sin los recursos necesarios, las proyecciones que tiene los centros educativos de formar docentes capacitados y trabajar en su currículo, así como la creación de más de 9, 711 aulas que hacen falta y restaurar las 12 mil existentes, sería imposible.
Señaló que los desafíos existentes en educación son grandes, y se refiere a lo mal parado que queda el país frente a las evaluaciones internacionales y el foro Económico Mundial que de 139 naciones la educación básica de territorio dominicano quedó en el lugar 137 y en un estudio de educación cívica quedó último.
“No hay manera de no concluir que verdaderamente la educación dominicana esta en crisis, para enfrentar eso hacen falta los recursos”, recalcó.
Dijo que si aún se tienen dudas de la validación de este reclamo, debe de quedar confirmado abrumadoramente en lo sucedido en Mar de Plata Argentina, donde se determinó que el mínimo de inversión en educación debe de ser un 5.5%.
Considero necesaria la preparación de recursos humanos especializados ya que una mala calidad de educación de formación implica necesariamente una perdida en competitividad.
