Este caso es un mensaje que debe servir de ejemplo a las madres que juegan a vender a sus hijas.
La decisión en el caso de Wander Franco ha dado mucho de qué hablar, porque, al final, más que castigar en extremo al que consumo el acto sexual ilícito, el tribunal decidió penalizar con mayor fuerza a quien lo puso en bandeja de plata, en este caso, la madre de la menor. Este caso es un mensaje que debe servir de ejemplo a las madres que juegan a vender a sus hijas.