El 2024 dejó una reducción en las producciones de cine en la República Dominicana
La industria cinematográfica de la República Dominicana continúa consolidándose como una plataforma de expresión artística, motor económico y herramienta de proyección cultural.
Por: Olga Montás
Durante el año 2024, se registraron avances tanto en la producción nacional como en la atracción de proyectos internacionales, respaldados por instrumentos legales y estadísticos clave como el Índice de Precios al Productor (IPP) y la Ley 108-10 de Fomento a la Industria Cinematográfica.
Los números actuales representan un avance con respecto a los años más duros de la pandemia, el ritmo de producción aún no alcanza los niveles prepandemia. En 2018 se rodaron 42 películas, cifra que cayó dramáticamente a 19 en 2020 debido al impacto del COVID-19.
Producción Nacional y Atractivo Internacional
En 2024, se estrenaron 49 películas dominicanas, a las que se sumaron 10 producciones extranjeras, sumando un total de 59 filmes exhibidos en salas del país. Estos se proyectaron en 282 pantallas distribuidas en 27 complejos de cine, con una audiencia que alcanzó los 3.5 millones de visitas, generando ingresos por más de RD$ 1,056 millones.
Además, la República Dominicana fue escenario para 175 proyectos cinematográficos rodados durante el año, de los cuales 95 fueron internacionales. Este dato resalta el éxito del país como destino para el rodaje de producciones extranjeras, muchas de las cuales se acogieron al Permiso Único de Rodaje (PUR) contemplado en la Ley 108-10, aunque cabe destacar que no todos estos proyectos aplicaron a los incentivos fiscales establecidos por dicha normativa.
Se puede ver un claro avance de producción post-pandemia, sin embargo el Cine Dominicano ha reducido su productividad según las estadísticas y miembros de la Dirección de la Oficina Nacional de Estadística.
En este contexto de expansión, el Índice de Precios al Productor (IPP) se convierte en un instrumento fundamental para entender la dinámica económica de la industria. El IPP, publicado por la Oficina Nacional de Estadística (ONE), analiza los cambios en los precios de bienes y servicios en el primer nivel de comercialización, diferenciando entre industria manufacturera y servicios, donde se incluyen actividades como la producción de películas, televisión, grabación de sonido y edición musical.
Indicadores Regulatorios y de Creación
La Dirección General de Cine (DGCINE), junto con la Oficina Nacional de Derecho de Autor (ONDA), registró un total de 27 solicitudes de registros asociados a la cinematografía, desglosadas en 12 cortometrajes y 15 guiones cinematográficos. Estos datos evidencian la vitalidad de la creación audiovisual dominicana y el interés creciente por la protección intelectual de las obras.
Un indicador esencial para medir la evolución del sector es el Índice de Precios al Productor (IPP) aplicado a actividades como la producción de películas, programas de televisión, grabación de sonido y edición musical. Durante 2024, este índice reflejó las variaciones en los costos de producción en la industria audiovisual, permitiendo a los agentes del sector —desde productores hasta instituciones reguladoras— tomar decisiones más informadas sobre precios, inversiones y sostenibilidad económica.
IPP Servicios 2024: Contexto y Relevancia para el Cine
El IPP del sector Servicios mostró una variación acumulada anual de 2.90%. Aunque actividades como alojamiento (+11.20%) y transporte (+9.17%) registraron los mayores aumentos, otras como programación y transmisión (-2.96%) y actividades deportivas y recreativas (-2.98%) mostraron descensos. Esto refleja una moderación generalizada en los precios de los servicios de entretenimiento, posiblemente impulsada por el retorno a la normalidad post-pandemia y la digitalización acelerada.
En el caso específico de la industria audiovisual, estos datos sugieren un entorno relativamente estable en términos de costos de producción, lo cual puede haber facilitado tanto la generación de contenido local como la llegada de producciones extranjeras.
A continuación el informe completo:
Crecimiento Económico y Cine: Una Relación Interdependiente
El crecimiento económico del país en 2024 —con un PIB que aumentó un 5.0% y una inflación interanual controlada de 3.35%— generó un entorno favorable para el consumo de bienes culturales, como el cine. Esto se traduce no solo en mayores visitas a las salas, sino también en un mayor interés por parte de inversionistas y cineastas en participar en la escena dominicana.
El Rol de la Ley 108-10
La Ley 108-10 continúa siendo el principal pilar para el desarrollo armónico de la industria cinematográfica en el país. Al facilitar la inversión, promover la formación técnica y artística, y atraer proyectos internacionales, esta legislación ha contribuido al posicionamiento de República Dominicana como un hub cinematográfico regional.
Su enfoque integral ha permitido no solo el crecimiento cuantitativo del sector, sino también su fortalecimiento institucional, como se refleja en la colaboración interinstitucional entre la DGCINE, la ONDA, la Oficina Nacional de Estadística (ONE), y el Sistema de Información y Registro Cinematográfico (SIRECINE).
El 2024 fue un año de consolidación para el cine dominicano, tanto por la producción nacional como por la llegada de proyectos extranjeros. El uso del IPP como herramienta analítica, junto con los registros de obras y los permisos de rodaje, permite tener una visión clara y estructurada del impacto económico y cultural del cine en el país. No obstante, a comparación de años anteriores el Cine Dominicano sufre un declive notable.
En este contexto, la Ley 108-10 se reafirma como instrumento vital para fomentar un crecimiento sostenible, equitativo y creativo de la industria audiovisual dominicana.