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El escándalo de la familia Bettencourt llega a los escenarios

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Liliane Bettencourt

PARÍS.- El escándalo relacionado con la multimillonaria Liliane Bettencourt, que ha destapado los secretos de una de las familias más ricas del mundo, llega este sábado a escena teatral parisina con un texto delirante que se centra en los alborotos financieros y soslaya las ramificaciones políticas.

«¿Cómo se llama la renta de los pobres?», pregunta el álter ego de la millonaria, Marianne Caquencourt, a su amigo fotógrafo al que llego regalar cerca de mil millones de euros (unos 1,360 millones de dólares) en efectivo, obras de arte y seguros, a lo que éste responde: «Un salario».

Así lo recoge este jueves, a dos días del estreno, «Le Parisien», periódico que ha podido asistir a los últimos ensayos de la obra «Porque yo lo robo» (en alusión al célebre eslogan «Porque yo lo valgo» que popularizó el imperio de cosméticos L’Oreal que heredó Bettencourt) y que firma el presentador de televisión Laurent Ruquier.

La pieza se estrenará este sábado en el teatro Saint-Georges de París bajo la dirección de Jean-Luc Moreau y con Catherine Arditi en la piel de la millonaria de 88 años y Ariel Wizman en la del fotógrafo François-Marie Banier, casi veinte años menor que la heredera de L’Oreal.

El texto no abundará en las intrigas que provocaron la apertura de media docena de investigaciones judiciales alrededor del entonces ministro de Trabajo, Eric Woerth, y que llegaron a salpicar al propio Nicolas Sarkozy, según los anticipos publicados por el diario, sino que se centrará en la relación entre el dandy y la viuda.

Los generosos regalos de la viuda a Barnier desencadenaron un cisma familiar entre Bettencourt y su hija que llegó a su momento de máximo esplendor dramático cuando se filtraron a la prensa más de veinte horas de grabaciones de conversaciones privadas realizadas por el mayordomo de la multimillonaria, que cobrará vida en el escenario a través de Olivier Pajot.

Esas cintas fueron las que despertaron la inspiración del prolífico Roquier, que comenzó a escribir la obra antes del pasado verano y terminó el texto en septiembre.

La obra, anticipo de la película que prepara el productor Thomas Langmann y que contará con el director Michel Hazanavicius y con la actriz Jeanne Moreau en el papel de Bettencourt, exagera la realidad para acercarlo a la comedia.

«Si contásemos el caso tal y como se desarrolló, no tendría interés», explica el director en declaraciones a «Le Parisien», donde argumenta que era necesario hacer una pequeña adaptación.

Por eso el decorado es «desenfadado y poético, no realista», comenta Moreau, quien ilustra el tono de la obra con el hecho de que cada personaje que entre en escena deba lavarse los pies en una pila llena de billetes de 500 euros.

El texto, no obstante, está escrito antes de que madre e hija Bettencourt hicieran las paces ante la justicia, en virtud de unas cláusulas acordadas por su abogados que no han trascendido a la prensa.

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