SANTO DOMINGO, República Dominicana.- ¿Cómo es posible que el PRD mantenga al país prácticamente en ascuas? Si en ascuas. Los problemas internos del Partido Blanco se han traducido en un trastorno en la vida nacional, que atemoriza a la población, al pensar que nuevamente se pueden repetir los hechos violentos que ocurrieron en enero.
Para esa fecha, la seguridad de los residentes y negocios en el entorno de la Casa Nacional de PRD estuvo en juego. Ahora, cuando se habla de la próxima reunión del CEN, el ministro de Interior y Policía dice que allí estarán los agentes policiales, en las afueras donde se celebre el encuentro.
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El mayor partido de oposición, la más antigua de las organizaciones políticas vigentes, debería estar jugando su rol de contrapeso para la vigencia efectiva de la democracia.
¿No se dan cuentan los dirigentes de ese partido, especialmente Miguel Vargas Maldonado e Hipólito Mejía, que mientras ellos se enfrascan en una lucha interna, pierden más poder como grupo?
¿No se dan cuenta que solos llegan más rápido, pero juntos llegan más lejos?
¿No entienden que la gente se cansa, hasta los dirigentes de su mismo partido, que se sienten hastiados?
¿No se dan cuenta que la derrota con estos conflictos no es solo del partido, que cada día parece alejarse más de alcanzar el poder, sino del país, que no ve la esperanza de una oposicion organizada que cumpla con su función como en otros países?
Observo con admiración lo que está ocurriendo, por ejemplo en España, donde el lider socialista Rubalcaba anunció que presentará una mocion de censura, la tercera en la historia de la democracia de ese país, si el presidente no acude al Congreso a dar explicaciones por le caso del extesorero de partido de gobierno.
¿Llegará la democracia dominicana a obtener tal grado de avance para que nuestros partidos sean verdaderos ejemplos a seguir en el fortalecimiento de la institucionalidad, la transparencia y la lucha contra la corrupción y los excesos desde el poder? A la clase política nacional y a sus dirigentes les toca dar respuesta a esta preocupación.