Ciudad del Vaticano, 24 dic (EFE).- El papa Francisco inauguró este martes el Jubileo con la apertura de la Puerta Santa en la basílica de San Pedro, enviando un mensaje de esperanza a los países más afectados por la pobreza, las deudas injustas y las guerras. En su homilía durante la Misa del Gallo, Francisco destacó la necesidad de transformar las injusticias que afectan a las comunidades más vulnerables.
«En esta noche, la puerta de la esperanza se ha abierto de par en par al mundo; en esta noche, Dios dice a cada uno: ¡también hay esperanza para ti!», afirmó el papa, quien también recordó que «Dios perdona siempre y lo perdona todo».
El pontífice pidió que este Año Santo sea una oportunidad para aliviar la carga de los países más pobres, abrumados por deudas injustas, y para combatir las esclavitudes modernas y antiguas que siguen vigentes. En este contexto, su mensaje resonó especialmente para regiones como el Caribe y América Latina, incluidas naciones como República Dominicana, donde los desafíos económicos y sociales han sido tema recurrente en los últimos años.
«Todos nosotros tenemos el don y la tarea de llevar esperanza allí donde se ha perdido; allí donde la vida está herida, en las expectativas traicionadas, en los sueños rotos, en los fracasos que destrozan el corazón; en el cansancio de quien no puede más, en la soledad amarga de quien se siente derrotado», expresó el pontífice, aludiendo a la necesidad de actuar con solidaridad hacia los más desprotegidos.
El papa Francisco también se refirió a los efectos de la guerra y la violencia, recordando a las víctimas de conflictos, incluidos los niños afectados por bombardeos en escuelas. En un llamado a la acción, exhortó a la humanidad a indignarse por las injusticias y trabajar por un mundo en el que prevalezcan la paz y la justicia.
«Nos pide que nos hagamos peregrinos en busca de la verdad, soñadores incansables, mujeres y hombres que se dejan inquietar por el sueño de Dios; el sueño de un mundo nuevo, donde reinan la paz y la justicia», declaró.
Francisco culminará los ritos de Navidad este miércoles con su tradicional bendición ‘Urbi et Orbi’ desde la logia central de la basílica de San Pedro.