REDACCIÓN INTERNACIONAL.- El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió este lunes con una bajada del 3,5 %, hasta los 95,10 dólares el barril, debido a los bajos datos de fabricación de China y Japón que pesan sobre las perspectivas de la demanda de oro negro.
A las 09.00 hora local de Nueva York (13.00 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en septiembre restaban 3,52 dólares con respecto al cierre de la sesión anterior.
El índice gerente de compras de China (PMI, indicador de referencia del sector industrial) que elabora la compañía británica de información económica IHS Markit pasó de 51,7 puntos en junio a 50,4 en julio, según las cifras publicadas hoy.
El dato queda lejos de lo vaticinado por los analistas, que predecían que llegase a 52 puntos.
Por su parte, la actividad manufacturera japonesa se llegó a su tasa más débil en 10 meses en julio, según mostraron los datos este lunes.
El próximo miércoles, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y aliados liderados por Rusia, conocidos como OPEP+, se reunirán en Viena.
«La OPEP+ insinuó que pueden acelerar los aumentos de sus objetivos de producción colectiva», indica hoy el analista Tom Essaye, en un informe de la firma Sevens Report.
Essaye, además, señala que de cara al futuro las preocupaciones por una posible recesión en EE. UU. continuarán «controlando el WTI», pero que los temores geopolíticos relacionados con la guerra entre Rusia y Ucrania «ayudarán a mantener un mercado global de energía más ampliado».