x
Batalla Electoral 2024

El PRD en las manos del PLD

La suerte del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), parece estar en las manos del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) que controla todos los organismos de poder del país, incluso la Junta Central Electoral y el Tribunal Superior Electoral, que deciden, quién gana elecciones y quién dirige un partido de oposición.

El PLD logró destruir al otrora poderoso Partido Reformista y convertirlo en una entelequia corrompiendo a sus principales dirigentes con cargos en el Estado y otras prebendas. El partido de Balaguer es hoy una especie de “comité de base” del oficialismo.

Lo mismo sucedió con los llamados “partidos emergentes” que no son más que franquicias de oportunistas y vividores que decidieron no trabajar y ser parte del robo y el saqueo del que es víctima el pueblo dominicano, con pocas excepciones.

Posteriormente, el PLD decidió “entrarle al PRD” para destruirlo, dividirlo y debilitarlo de tal manera que no pudiera “levantar cabeza” nunca más para lo cual han utilizado a Miguel Vargas, que al llegar Hipólito Mejía al poder en el 2000 estaba virtualmente quebrado económicamente, pero que al salir del cargo, cuatro años más tarde, había multiplicado los panes y los peces como un milagro divino, algo muy común entre los políticos del patio.

Miguel Vargas es hoy en el PRD, lo mismo que Carlos Morales Troncoso en el Partido Reformista desde hace algunos años.

Miguel Vargas cometió el mayor acto de traición al PRD en más de 70 años de historia al firmar el “pacto de las corbatas azules”. El pacto con Leonel Fernández y el PLD, con la anuencia de Danilo Medina, lo llevó a trabajar para impedir que el candidato de su partido ganara las elecciones.

Su traición fue burda y descarada. Cumplió su misión cuando Danilo Medina fue proclamado “ganador” de los comicios. No conforme, visitó al presidente de la Junta Central Electoral para darle un reconocimiento por el trabajo realizado en contra del PRD y de su candidato Hipólito Mejía.

El apoyo de Leonel y del PLD a Miguel Vargas, incluyendo a Danilo, es más que evidente. Las sentencias del Tribunal Superior Electoral favoreciendo al señor Vargas, no me dejan mentir.

El sector de Hipólito cayó ingenuamente en la trampa legal acudiendo a los tribunales creyendo en un sistema de justicia inexistente. (La sentencia de Mariano Germán, presidente de la Suprema Corte de Justicia en el caso del mequetrefe senador de Baní, Wilton Guerrero, es solo una muestra)

El problema, lo he dicho y lo he escrito muchas veces, no es jurídico, es político. Esos tribunales jamás fallaran a favor del sector de Hipólito a menos que no se vean obligados por la fuerza de las masas enardecidas.

Hipólito visitó a Danilo con una nutrida comitiva integrada por personas honorables. Más atrás fue Luis Abinader. No sé a qué. Miguel Vargas, a través de Leonel, cabildeó lo suyo para también ir a Palacio. La mayoría de sus acompañantes debieron avergonzar a los dignos militantes del PRD. Al día siguiente Miguel visitó a su socio y jefe, Leonel, para que no quedara duda de la continuidad del “pacto de las corbatas azules”, ni de su traición al PRD. ¿Y que hizo Leonel? Burlarse de Miguel y del PRD. Eso hizo. “Yo le deseo suerte al PRD, pero quiero que gane el PLD”. Eso dijo, muerto de la risa. (Mientras sean Leonel y Danilo quienes decidan el destino del PRD, olvidémonos del Tango, que murió Gardel)

Comenta con facebook