El secreto del influencer Oscar El Teacher: cómo grabados videos al día sin fallar

La edición corre por cuenta de un camarógrafo profesional que también forma parte de este núcleo creativo.

5 minutos de lectura
El secreto del influencer Oscar El Teacher: cómo grabados videos al día sin fallar

Escuchar el artículo
Detener

Santo Domingo.– SANTO DOMINGO.- Organización, humor y constancia: la rutina creativa de Oscar Ramos que nunca se detiene Oscar Ramos, mejor conocido en redes como Oscar El Teacher, no solo ha construido una comunidad digital que supera los 750 mil seguidores en Facebook y más de 454 mil en Instagram; también ha creado una metodología de trabajo que le permite grabar dos videos al día sin fallar, combinando disciplina, creatividad e improvisación con un equipo que opera más como familia que como productora.

Cada lunes, Oscar organiza un “Open House” en su casa estudio de Miami. No es un evento formal, pero sí una pieza clave de su calendario creativo. Ese día se reúnen los integrantes de su equipo un grupo diverso de colaboradores como Brayan El Joker, Nacho El Biónico o Uchi y definen las ideas que nutrirán la semana.


“Nosotros organizamos un Open House todos los lunes, donde invitamos a influencers que quieran colaborar con nuestro canal. Allí compartimos ideas, grabamos escenas y organizamos el contenido de la semana”.


Graban sketches, intercambian ideas y aprovechan el espacio equipado con cámaras profesionales y luces.

La edición corre por cuenta de un camarógrafo profesional que también forma parte de este núcleo creativo.


Aunque parece mucho, el método funciona gracias a una regla: planificar sin perder la frescura. Oscar no cree en los guiones rígidos ni en la producción millonaria. Cree en la espontaneidad. Por eso, uno de sus videos más virales con más de 130 millones de vistas nació de una simple broma con un amigo, Chico
Bombón, sin guion ni edición elaborada.


“El video más improvisado fue uno en donde participa Chico Bombón, quien ya no nos acompaña en este plano. Se trataba de una parodia, como si fuera un comercial de una piscina. Él entró al agua con su color natural siendo una persona de color y salió completamente blanco porque le habíamos echado cloro a la
piscina.


La escena fue espontánea, sin guion, y terminó convirtiéndose en nuestro video más viral”.

Oscar Ramos sube al menos dos videos diarios en todas sus plataformas: Facebook, Instagram (@Oscar_elteacher), TikTok y YouTube. Pero más allá del número, lo interesante está en su ritmo.
La mayoría de sus contenidos están programados con antelación a través de herramientas como
Meta Business Suite y Later.

Para la edición, usa Adobe Premiere Pro o CapCut, dependiendo del tipo de video y urgencia. ¿Y cuánto tiempo dedica realmente al día? “No me toma tanto grabar, pero sí dedico tiempo a responder mensajes y mantenerme conectado con mi comunidad”.


La retroalimentación directa de su audiencia, especialmente cuando alguien le cuenta que sus videos ayudan a sobrellevar un mal día o una situación difícil, es lo que más valora.


“La anécdota más especial es cuando una madre nos escribió diciendo que nuestros videos ayudaron a su hijo con discapacidad a sonreír durante su tratamiento médico”.


Aunque Oscar es la cara del proyecto, no está solo. El Imperio del Humor funciona más como una familia creativa que como una productora. Cada miembro aporta ideas, actúa y participa con libertad.


“El Imperio del Humor funciona como un grupo de amigos que se reúne a crear contenido con autenticidad y buena vibra. No hay un guion cerrado ni una fórmula rígida; el que puede asistir ese día, participa”.


Y es justo esa autenticidad la que lo ha hecho crecer. En apenas un año, duplicó su comunidad
en redes y hoy su contenido ha alcanzado más de 411 millones de vistas en Facebook, 301 millones en Instagram y 109 millones en TikTok. No necesita sets enormes ni actores profesionales. Necesita empatía, disciplina y una buena historia.


Oscar Ramos demuestra que es posible mantener una rutina constante de producción sin caer en la monotonía.

Su secreto no está en la tecnología, sino en cómo usa el humor para conectar con otros sin burlarse de nadie. Y aunque tiene métricas impresionantes, lo que más le importa es que su comunidad siga creciendo desde la risa, el respeto y la inclusión.

LO MÁS LEÍDO
LO MÁS VISTO
TE PUEDE INTERERSAR