Santo Domingo. La República Dominicana sigue consolidándose como uno de los destinos turísticos más importantes de Latinoamérica, con un impacto directo en la recuperación y el crecimiento económico del país. En 2023, el sector turismo alcanzó un hito histórico al recibir más de 10 millones de visitantes por primera vez, y las proyecciones para 2024 anticipan que esta cifra superará los 11.5 millones, lo que posicionaría al país como el segundo destino más visitado de la región.
El presidente Luis Abinader destacó estos logros durante su discurso de toma de posesión, subrayando que el turismo ha sido un pilar fundamental en la recuperación económica post-pandemia. Este crecimiento ha sido posible gracias a una estrategia de rápida apertura y reformas que no solo permitieron superar las expectativas previas al COVID-19, sino que también colocaron a la República Dominicana en un lugar destacado en el mapa turístico global.
Para sostener y potenciar este crecimiento, el gobierno ha impulsado una ambiciosa expansión en infraestructura. Dos nuevos puertos turísticos han sido construidos, y otros tres están en proceso gracias a alianzas público-privadas. Asimismo, se está ejecutando un gran muelle logístico multimodal en Manzanillo, en la región norte del país, y se han desarrollado más de 15 muelles pesqueros a lo largo del territorio nacional.
Además, Abinader mencionó la importancia de los proyectos de transporte masivo, como el monorriel de Santiago, los teleféricos de Santiago y Los Alcarrizos, y la extensión del metro de Santo Domingo. Estos proyectos no solo mejoran la conectividad interna, sino que también refuerzan la capacidad del país para actuar como un centro logístico estratégico en el Caribe.
El desarrollo de la infraestructura aeroportuaria es otro factor clave en este proceso. La expansión de los aeropuertos de Punta Cana, Santo Domingo, Santiago y la nueva terminal en Pedernales han fortalecido aún más la posición del país como un hub logístico de clase mundial, aprovechando su ubicación geográfica privilegiada en el Caribe.
Con todos estos avances, la República Dominicana se consolida como la séptima economía de América Latina, avanzando hacia un desarrollo sostenible que promete beneficiar a todos los ciudadanos y mantener al país en la senda del crecimiento económico y la prosperidad social.
Estas cifras y proyecciones reflejan el éxito de las políticas económicas y turísticas implementadas por el gobierno, y subrayan la importancia del turismo como motor del desarrollo económico del país.