En medio de conflicto con Editoras, ministro de Educación cuestiona la pérdida de libros de historia

Santo Domingo.- A través de su cuenta de Twitter el ministro de Educación, Ángel Hernández, escribió este sábado que más de 90 mil libros de historia dominicana se han perdido en un almacén porque el contenido desnaturaliza los hechos históricos que han ocurrido en República Dominicana.

“En un almacén del MINERD hay 94 mil libros de Ciencias Sociales, pagados con recursos del 4%, que por desnaturalizar la Historia Dominicana fueron retirados de las aulas, pero no hubo penalidad para la editora que cometió ese desatino. ¿Cómo es posible?”, escribió Ángel Hernández en su cuenta de Twitter.

En este mensaje el ministro explica que dicho material fue retirado de las aulas, y cuestiona que cómo es posible que este tipo de cosas ocurran sin penalizar a los responsables.

Dicho mensaje viene luego que, el pasado martes, dos casas editoriales establecidas en el país deploraron que el Ministerio de Educación pretenda “imprimir sueños” al realizar una convocatoria de «Manifestación de Interés”, para la impresión de libros de textos que aún no existen, por lo que definieron la decisión como “improvisada y absurda.”

En esos términos se pronunciaron Casa Duarte y Actualidad Escolar 2000 frente a la convocatoria a manifestación de interés del proyecto “Contratación de Servicio de Impresión de los Libros de Textos de los Grados Pre-Kinder, Kinder, Pre-Primario, Primario (1er al 6to grado) y Secundario (1er al 6to grado)”, publicada recientemente por el ministerio.

Casa Duarte interpuso una medida cautelar ante el Tribunal Superior Administrativo con el fin de obtener una decisión judicial que ordene provisionalmente la suspensión de los efectos de la Ordenanza 03-2022, que crea una Unidad Editorial para producir los textos escolares, violando los derechos adquiridos de las editoras, normas constitucionales y otras leyes.

El recurso legal interpuesto asegura que de continuar las ejecutorias contenidas en la Ordenanza 03-2022, se producirá el colapso de la industria editorial que tradicionalmente ha comercializado libros de texto escolares, para la cual el sector público representa más del 80% de su mercado.