SANTO DOMINGO.- Son velados a puertas cerradas los restos de los dos niños que fueron asesinados por su padre en San José de Ocoa, en medio de lamentos de familiares, que aseguran que las autoridades no debieron de darle permiso al hombre de 42 años para que se llevará los niños, tras asegurar que tenía tiempo actuando de forma extraña y violenta.
En la capilla Dorada en la funeraria Gresefu, de la autopista Las Américas están siendo velados los cuerpos de Alys y Fred Olaverria de 14 y ocho años, donde su madre recibe el apoyo de familiares y allegados que acuden desde tempranas horas a darle el pésame.
Al indicar que la madre tenía la custodia de los niños, Los abuelos maternos de los infantes lamentaron que la autoridades le hayan dado permiso para que su padre y verdugo se los llevara por varios días, tras asegurar que hacía tiempo tenía un comportamiento extraño.
A esa funeraria también han acudido ex compañeros de la escuela de los niños que residían en el sector Villa Duarte con su madre para darle las condolencias.
De acuerdo con informaciones Alys y Fred se encontraban con su padre desde el 25 de diciembre y había acordado entregarlos a su madre el miércoles 28 y cuando salió de su casa materna en Ocoa, horas más tarde llamó a su hermana para que lo ayudara con el carro averiado a 21 kilómetros del cruce de Ocoa y al esta llegar a la zona ubicada en la comunidad La Vuelta de las Palomas encontró la tragedia.
El padre de los niños Freddy Olaverria, quien se suicidó tras quitarles la vida a sus hijos, está siendo velados en la funeraria municipal de la comunidad Sabana Larga Abajo, en San José de Ocoa y será sepultado esta tarde en el cementerio de la demarcación.
Los infantes serán sepultados a las tres de la tarde en el cementerio Cristo Salvador.