París.- La Justicia francesa decidió este jueves suspender por motivos médicos la condena del terrorista corso Yvan Colonna, en coma desde principios de marzo tras haber sido agredido en prisión por otro preso.
Colonna, de 61 años y condenado a cadena perpetua por el asesinato en 1998 del máximo representante del Estado francés en Córcega, el prefecto Claude Erignac, se encuentra hospitalizado en Marsella entre la vida y la muerte.
La ley francesa prevé que una condena de cárcel puede quedar suspendida en caso de pronóstico vital grave, y el juez de aplicación de las penas antiterrorista tomó la decisión tras la opinión favorable de la Fiscalía Antiterrorista, apuntó el diario Le Figaro.
«Es un alivio para la familia», dijo a la prensa uno de sus abogados, Sylvain Cormier, según el cual su cliente no depende ya de la administración penitenciaria.
La suspensión de su pena, reclamada por los nacionalistas corsos, es sin embargo provisional, hasta que su estado de salud mejore, y llegado ese momento se puede contemplar un nuevo encarcelamiento.
Las autoridades habían denunciado una dejación de las responsabilidades del Estado francés al no proteger a Colonna lo suficiente de los otros presos en la cárcel de Arles, donde el agresor, islamista, ha sido imputado por terrorismo.
Esa agresión desencadenó una oleada de protestas en Córcega por parte de los movimientos nacionalistas e independentistas que se ha saldado con destrozos materiales y decenas de heridos tanto entre los participantes como entre las fuerzas del orden.
Tras dos semanas de altercados, el Gobierno francés se felicitó este jueves de la vuelta a la calma en esa isla mediterránea, «aunque sea frágil», y dijo que si esta tendencia de estabilidad se prolonga se podrá negociar sobre las competencias locales y sobre otras demandas penitenciarias de las familias de terroristas corsos.