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Gobierno venezolano prohíbe aplicar alzas de precio en servicios de telefonía

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VENEZUELACARACAS, Venezuela.- El Gobierno de Venezuela ordenó hoy a las empresas de telecomunicaciones que operan en el país suspender la aplicación de cualquier subida en las tarifas de sus servicios, un anunció que deja sin efecto aumentos de más del 100 por ciento decididos por las compañías de telefonía en los últimos días.

«Por instrucciones del Presidente de la República, Nicolás Maduro Moros, queda suspendida a partir de la presente fecha la aplicación de los incrementos de precios y tarifas de todos los servicios de telecomunicaciones que se prestan en el territorio», informó la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), a través de un comunicado.

Asimismo, anunció la instrucción del jefe de Estado venezolano para «de manera inmediata» instalar «una Mesa de Trabajo conformada por los operadores y los organismos públicos competentes para revisar todos los temas vinculados con la prestación de servicios y el desarrollo del sector de las Telecomunicaciones y la Informática, motor estratégico de la Agenda Económica Bolivariana».

Estas mesas se instalaran el próximo 1 de agostó, según Conatel.

La decisión del Ejecutivo venezolano se anunció luego de que en los últimos días las compañías de telecomunicaciones públicas y privadas que operan en Venezuela anunciaran altísimos incrementos en sus tarifas de servicios.

De esta manera, un plan de servicios que costaba unos 800 bolívares por mes (lo que equivale a 80 dólares según la tasa oficial más baja del mercado o 1,25 dólares a la tasa más alta) pasó a costar 1.800 bolívares (180 o 2,8 dólares) de un mes a otro.

La mayor parte del mercado venezolano está en manos de la compañía Movistar, de la empresa Telefónica de España, con el 41,6 % de los usuarios, seguida de la estatal Movilnet con el 40,8 % y la privada Digitel, con el 17,6 %, según cifras de Conatel.

Las medidas de control de los precios del Gobierno socialista se implementan en un momento en el que el país caribeño experimenta una de las peores crisis económicas de su historia, con una inflación que en 2015 superó el 180 %.

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