SANTO DOMINGO.- El amanecer de este miércoles nos trajo la dolorosa noticia del fallecimiento del periodista, historiador y académico Adriano Miguel Tejada.
La consternación ha sido generalizada en diferentes sectores de la sociedad a la que a lo largo de su trayectoria profesional hizo grandes aportes con su pensamiento y acciones.
Como periodista y director de Diario Libre, su pluma equilibrada pero firme en sus convicciones, se ganó el respeto y la admiración del país.
Cuando decidió retirarse de la dirección del periódico, dijo que lo hacía para dedicarle más tiempo a la familia, especialmente a sus nietos.
En ese momento tuvo además un gesto que lo enalteció como ser noble, justo y sensible al destacar los atributos personales y la capacidad de quien le sucedería en la dirección de Diario Libre, la periodista Inés Aizpún.
Adriano Miguel, contribuyó a la investigación histórica y al fomento de la cultura y nos deja un legado bibliográfico de gran valor para las presentes y futuras generaciones.
Muchas de las anécdotas expresadas en este día coinciden en describirlo como un hombre auténtico y sencillo, que gozaba del buen humor, sin actitudes arrogantes o poses de ocasión. Por estos y otros muchos atributos que regaló generosamente a todos los que lo tratamos a lo largo de su existencia, su partida deja un hondo y muy sentido vacío en el país. Paz a los restos de este ilustre mocano.
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