Inauguran área de salud mental en la Diócesis de San Pedro de Macorís
En la actualidad, cada miércoles reciben un promedio de 20 pacientes, a quienes les ofrecen consultas de psicología, terapias familiares, entrega de medicamentos y seguimiento a la adhesión del tratamiento psicofarmacológico.
SAN PEDRO DE MACORIS.- Con un consultorio, dos camas para hospitalización o internamiento de corta estadía, entre otros espacios, fue inaugurada el área de salud mental “Dios amando al pobre”, en el hospital católico diocesano Sagrado Corazón de Jesús.
En el acto estuvo presente Monseñor Santiago Rodríguez, obispo de la Diócesis de San Pedro de Macorís, y el ministro de Salud Pública, Daniel Rivera, a quien la gobernadora provincial, Aracelys Villanueva, solicitó el nombramiento del personal que se requiere para brindar los servicios en la referida área de salud mental.
Al referirse a la situación de los enfermos mentales en el país, Rivera manifestó que con el paso del tiempo se ha reducido el estigma hacia estos pacientes y ha mejorado el abordaje de la salud mental en el país, al tiempo que resaltó la importancia de la familia en el seguimiento al tratamiento de los pacientes, ya que el acompañamiento es un factor clave en su mejoría.
En tanto, Francis Báez, encargada del área de salud mental del Servicio Nacional de Salud (SNS), celebró el respaldo del obispo al equipo que tuvo esta iniciativa que surgió ante la alegada poca atención a la salud mental en la Región Este: “Le doy gracias a la parte eclesiástica, porque ha mirado la salud mental como una responsabilidad de la Iglesia para dar respuesta a una población, si todos nos unimos podemos llegar poquito a poquito y ampliar los servicios de salud mental”.
Sobre el programa “Dios amando al pobre” (DAMALP)
La psicóloga Brígida Marte, voluntaria de la Pastoral de la Salud de la Diócesis, explicó que el programa inició sus servicios a mediados de 2014 cuando un grupo de hombres y mujeres, preocupados por la situación de los enfermos mentales del municipio de Quisqueya, se reunieron con la Pastoral Social de la parroquia Nuestra Señora de la Altagracia para poner en marcha el proyecto.
En la actualidad, cada miércoles reciben un promedio de 20 pacientes, a quienes les ofrecen consultas de psicología, terapias familiares, entrega de medicamentos y seguimiento a la adhesión del tratamiento psicofarmacológico.
Informó que ampliarán sus servicios para brindar atención primaria, psiquiatría, terapias de apoyo, terapias de grupo y visitas domiciliarias.
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