SANTO DOMINGO.- El economista y ex ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Juan Ariel Jiménez, sostiene que posiblemente se esté experimentando una política monetaria heterodoxa para “horizontalizar” la curva de Phillips, si es así, esto implica mayor inflación, advierte al encaje legal liberado por el Banco Central (BCRD) dominicano de RD$21,424.4 millones.
Jiménez explica que en esta curva si se busca tener menor inflación, se debe sacrificar la actividad económica y tener un poco más de desempleo. O al contrario, si se quiere bajar el desempleo en el corto plazo vía mayor demanda agregada, se amerita aceptar inflación más alta.
“Al encaje, el BCRD busca dinamizar una actividad económica (en este caso construcción) y evitar mayor desempleo. Esto es política monetaria expansiva, porque busca -expandir- el dinamismo económico vía mayor demanda”, explicó Jiménez.
Agregó que aumentar tasas de interés (contractivo) y liberar encaje (expansivo) al mismo tiempo, busca controlar la inflación y dinamizar la economía, esto solo fuera posible si la curva de Phillips fuera horizontal, por lo que es curioso para él, una liberación de encaje en medio de política monetaria contractiva, subrayó en su cuenta de Twitter.
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La liberación del encaje legal por parte del BCRD para la canalización de préstamos a una tasa de 9% anual con plazo de cinco a dos años, el 80% que equivale a RD$17.1 millones será destinado a la adquisición de viviendas de bajo costo. Mientras, el 20% (RD$4.28 millones) estará dirigido a la construcción.
La entidad bancaria informó que estos sectores que tiene una alta incidencia en la economía nacional, se “han vistos afectados por un entorno internacional convulso” que, a la vez, ha impactado en las tasas de interés de mercado, registrando un crecimiento real de “apenas” 0.6 % interanual durante enero-noviembre 2022.
Agregó que esta medida no modifica la actual postura monetaria restrictiva, al dejar sin cambio el coeficiente de encaje legal para las distintas entidades de intermediación financiera, la cual se observa en el comportamiento de los agregados monetarios que han moderado su crecimiento hasta ubicarse en tasas por debajo de la expansión del producto interno bruto (PIB) nominal.
Al cierre del año y a modo de ejemplo de esta medida no expansiva, indicó que el crecimiento del medio circulante (M1) se desaceleró hasta concluir el 2022 en 10.2 %, mientras la oferta monetaria ampliada (M2) se expandió en apenas 6.8 % y el dinero en sentido amplio (M3) en 5.4 % interanual.