Puerto Príncipe.- La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) insta al diálogo político en Haití para hacer frente a la aguda crisis en todos los órdenes que vive el país.
En su informe «Situación de derechos humanos en Haití» publicado este jueves y en el que se analizan los factores que comprometen esas libertades, en particular la inseguridad ciudadana y la inestabilidad democrática, la CIDH reitera «la importancia de profundizar e institucionalizar el diálogo político para alcanzar un acuerdo entre los diversos grupos y sectores del país y la diáspora».
«El objetivo común es restaurar y preservar las instituciones y la gobernanza democrática en el país, así como las condiciones de gestión de las capacidades del Estado, para permitirle hacer frente a las amenazas a la seguridad de los ciudadanos generadas por los grupos armados», prosigue el documento.
Haití vive un aumento de la inseguridad ciudadana debido a las acciones de las bandas armadas, en medio de la intensificación de las protestas, el vacío institucional agravado al expirar los mandatos de los legisladores y el asesinato del presidente Jovenel Moïse en 2021.
Frente a esta situación, el informe -el primero que publica la Comisión sobre Haití desde 2008- busca contribuir al proceso de estabilización de las instituciones democráticas, los derechos humanos y la seguridad ciudadana, condiciones esenciales para el pleno disfrute de los derechos humanos en el país más pobre de América.
El texto también destaca las crecientes necesidades de protección de la población en situación de movilidad a causa de la grave y generalizada violación de los derechos humanos en Haití.
«La CIDH advierte de que la situación de especial vulnerabilidad de los desplazados internos es compleja y tiene múltiples causas, como las derivadas de los efectos de los desastres naturales y de la violencia extrema de los grupos armados, a menudo de forma recurrente y agravada, lo que da lugar a sucesivos desplazamientos», señala.
El documento también identifica los principales retos para el respeto y la protección de los derechos económicos, sociales, culturales y medioambientales en Haití, así como los desafíos para salvaguardar la libertad de expresión, en especial en lo que respecta a la protección de periodistas y comunicadores.
En sus recomendaciones, la CIDH hace un llamamiento al Estado y a todos los actores sociales y políticos a que continúen y profundicen sus esfuerzos para recuperar el marco constitucional, con el fin de hacer posible la recuperación de las instituciones democráticas, entre otros objetivos.
El organismo también se refiere a los retos históricos y estructurales que han marcado la trayectoria institucional y social de Haití y reconoce los importantes pasos dados en los últimos años hacia la consolidación de una democracia representativa.
El informe fue elaborado a partir de la recopilación y procesamiento de la información recibida por los distintos mecanismos de monitoreo de la CIDH y presenta un diagnóstico que abarca el periodo comprendido entre 2018 y junio de 2022.