Hace siete años denuncié un plan para desplazar del Poder al Gobierno del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Era el lunes 23 de julio del 2018, y mis declaraciones fueron la noticia principal de Listin Diario que las puso con letras grandes en su primera página. Otros medios también le dieron importancia.
El Listin lo interpretó como una denuncia de un plan de Golpe de Estado, aunque no utilicé esas palabras, pero en realidad lo que se estaba gestando era eso.
Parecía un sainete, pues para nada se asemejaba al proceso que condujo al derrocamiento de Juan Bosch el 25 de septiembre de 1963.
Por algo tanto se dice que la historia se repite como una comedia solamente.
El ministro de Defensa y el ministro de Interior aquella vez en el 2018 reaccionaron sorprendidos y negaron mi versión. A un guardia se le perdona por su ignorancia de las intríngulis y la naturaleza de la política.
Solamente le dio crédito a mi advertencia una minoría, y la persona que tuvo el valor dentro del PLD y del Gobierno de apoyarme escribiendo un Artículo en El Nacional fue el doctor Euclides Gutiérrez Félix.
Mis Fuentes:
Yo estaba enterado diariamente de lo que acontecía en el país, aunque residiera entonces en Italia, pues cada mañana recibía los informes de inteligencia de las Fuerzas Armadas.
Además, por la Ciudad capital de Italia, Roma, pasaban y conversaban conmigo, políticos y activistas de todos los partidos, del Gobierno y de la Oposición. Me dejaban deducir sus planes y propósitos a favor o en contra del Gobierno que entonces encabezaba el presidente Danilo Medina.
Un Golpe de Estado Diferente:
Dos meses después de mi denuncia, mi ya fallecido amigo Adriano Miguel Tejada me preguntó si quería proporcionar una entrevista a Diario Libre sobre las circunstancias en que ocurrió el derrocamiento de Juan Bosch en 1963.
En efecto, le concedí la entrevista que fue publicada el 25 de Septiembre del 2018 en la primera página de ese prestigioso, acreditado y verídico medio impreso de comunicación dirigido nuevamente ahora por el amigo y colega Embajador Aníbal De Castro.
Pero a la nueva especie de Golpe de Estado en gestación al que me había referido dos meses antes en el Listin era algo muy distinto.
Desde un tiempo esta nueva modalidad de derrocamiento había tenido lugar en el 2014 en Kiev y otras ciudades de Europa y Asia.
En el caso dominicano este ensayo consistía en el uso del natural descontento popular por desgaste del ejercicio del Poder y de las divisiones internas del Gobierno del PLD por fuerzas externas para desacreditarlo con acciones de propaganda exagerada y movilizaciones de masas que ya venían ocurriendo desde el 2017 y se mantuvieron hasta el mismo 2020 de elecciones.
Las fotografias en los medios impresos y los videos divulgados y archivados son las evidencias de la participación de numerosos sujetos y entidades que participaron en aquellas manifestaciones para desplazar al PLD de la dirección del Estado.
Algunas de esas entidades gozaban de proyectos respaldados por órganos del Gobierno de los Estados Unidos.
Además se presentó luego la intromisión en 2019 en la política dominicana del que fuera Secretario de Estado Mike Pompeo y además del Senador Bob Menéndez.
Ya alejado del Gobierno norteamericano, Pompeo después reapareció durante la Administración demócrata de Joe Biden defendiendo un negocio de semáforos en el país salpicado de denuncias de corrupción. El presidente Donald Trump lo ha excluído de su equipo.
El exSenador demócrata Menéndez cumple actualmente condena por recibir sobornos del gobierno de Egipto.
No Entienden Todavía:
O no quieren admitir la realidad o esconden la cabeza algunos peledeístas para asimilar lo que les sucedió: el PLD y su división fueron el caldo de cultivo que desconocieron desde el 2018.
Su ceguera en el ejercicio del Poder facilitó su desplazamiento del Gobierno en 2020 con la innegable influencia que ejerció y sigue ejerciendo el Gobierno de los Estados Unidos de América en los asuntos dominicanos. Nada nuevo desde principios del Siglo XX.
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