La juventud dominicana y su compromiso social

Para las muchachas y los muchachos dominicanos, el mensaje de la necesidad de la paz mundial no debe ser solo del Papa Francisco, porque la tranquilidad espiritual es un patrimonio de toda la humanidad.

1.- En la República Dominicana, grupos dominantes que anteponen su conveniencia a la de la mayoría de la población, prueban su avaricia reduciendo la posición de los jóvenes a futilidades, a cosas insustanciales.

2.- Históricamente, los que aquí controlan el poder del Estado han estado interesados en ver a las jovencitas y a los jovencitos ocupándose del amor sexual, estar de presuntuosos, livianos, bebiendo romo a diario, en general atados a la vida mundana.

3.- En la historia de la humanidad, la juventud siempre ha existido y existirá, pero el compromiso de los jóvenes de hoy difiere del de sus antepasados, por la coyuntura sociopolítica que le ha correspondido desarrollar sus potencialidades.

4.- Bajo ningún sistema social atrasado, la gente joven puede desempeñar un papel al margen de la lucha que se da entre lo viejo que se quiere mantener y lo nuevo que ha de venir. Su lugar está al lado de los que accionan para que surja el porvenir.

5.- Es normal que en una sociedad ideológicamente policlasista, el joven manifieste posiciones contradictorias, lo que no le impide abrazar la causa del progreso, la modificación del régimen económico que ya se hizo añejo y representa un obstáculo para el desarrollo humano.

6.- En esta época del avance de la ciencia, la técnica y de las fuerzas productivas a nivel mundial, es un absurdo que los jóvenes dominicanos se dediquen a politiquear para recibir las migajas que condenan a la mayoría a vivir arrastrada, en la pobreza.

7.- Las jovencitas y los jovencitos dominicanos deben poner su reloj político en hora y razonar en el sentido de que no les cuadra estar de poca cosa, cuando su país está preñado de complicaciones de toda índole, de problemas que van desde comida, salud y educación, hasta la dificultad de seguridad para tener vida.

8.- Se ve feo el proceder de nuestros jóvenes andando por ahí haciendo politiquería, mientras el militarismo israelita masacra al pueblo palestino; Cuba sufre la dureza del bloqueo; los secuestrados por Estados Unidos en la cárcel en Guantánamo y Julian Assange a la espera de ser extraditado o no.

9.- Al parecer, para una gran parte de la juventud dominicana no cuenta la internacionalización de los cambios sociales, el desarrollo de los medios de comunicación, y el fomento de los contactos internacionales que intensifican el impacto de los procesos globales.

10.- Para las muchachas y los muchachos dominicanos, el mensaje de la necesidad de la paz mundial no debe ser solo del Papa Francisco, porque la tranquilidad espiritual es un patrimonio de toda la humanidad.

11.- El ser humano no necesita las bombas para crear, para expresar ideas hermosas, para ver las cosas bellas que nos ha dado la naturaleza y ha creado la mano de millones y millones de hombres y mujeres.

12.- La realidad le dice a los jóvenes de nuestro país, que la lucha por un medio ambiente sano no es una consigna hueca, porque respiramos un aire común, tenemos un solo mundo, una sola tierra y solamente podemos ver un cielo.

13.- Para la juventud dominicana debe ser algo de convicción propagar que todos los seres humanos somos iguales y no puede haber diferencia por el color de la piel. Es un compromiso luchar contra la discriminación racial. Esto tiene que ser una preocupación constante, permanente.

14.- Los jovencitos dominicanos que andan por ahí muy pepillitos que no se dan por nadie, que olviden su pepillismo y coloquen los pies sobre la tierra de su patria y se pongan a luchar en el orden social y político para sacar a su país del atraso y lo ubiquen en el progreso social.

15.- Es de esperar que jovencitas y jovencitos, que ahora están moviéndose por un cargo al Congreso Nacional, pongan su energía, talento y nobles sentimientos dirigidos a aportar para contribuir a sacar a su pueblo de la noche tenebrosa que lo han metido sus enemigos nacionales y extranjeros.

16.- La línea a seguir por lo mejor y más sensible de los jóvenes dominicanos, es ajustar sus sentimientos al signo de los tiempos, que llama al ser humano a luchar por un mundo mejor para todas y todos los habitantes del planeta tierra.