REDACCIÓN. – La NFL declaró este miércoles que el Super Bowl LIX, programado para el 9 de febrero en el Caesars Superdome de Nueva Orleans, contará con la seguridad necesaria, a pesar de que un atentado en la ciudad provocó la suspensión del Sugar Bowl del fútbol americano universitario.
La NFL y el comité anfitrión han colaborado con agencias locales, estatales y federales durante los últimos dos años para desarrollar planes de seguridad integrales. Estas sesiones de planificación se mantendrán, como ocurre con todos los eventos importantes de la NFL, y confiamos en que los asistentes disfrutarán de una experiencia segura en el Super Bowl.
La NFL hizo público su anuncio tras el atentado que dejó al menos diez muertos antes del partido de cuartos de final del fútbol americano universitario, lo que provocó el aplazamiento del encuentro a este jueves.
El incidente ocurrió la madrugada de este miércoles en Bourbon Street, un famoso barrio francés a unas 20 cuadras del estadio, donde decenas de personas celebraban el Año Nuevo y se preparaban para el partido de playoffs entre las universidades de Georgia y Notre Dame en el tradicional Sugar Bowl, que se celebra desde 1935.
Un hombre, a bordo de una camioneta, atropelló, según la policía, de manera intencionada a más de una decena de personas. Luego, tras detener el vehículo, bajó y disparó contra agentes policiales, que terminaron por abatirlo.
«Estamos profundamente entristecidos por la noticia del devastador incidente en Nueva Orleans. Nuestros pensamientos están con las víctimas, la comunidad de Nueva Orleans y todos los afectados», publico la NFL.
El Super Bowl LIX del próximo 9 de febrero será el octavo que se dispute en el Caesars Superdome.
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